A salón lleno, la Dirección de Innovación, Desarrollo y Transferencia Tecnológica de la UCM realizó un seminario que abordó el emprendimiento que nace en las universidades.
La actividad, que convocó a investigadores, estudiantes y representantes de empresas y organismos públicos, abrió el llamado “Día de la Innovación” en el campus San Miguel.
“Eventos como éste fomentan la credibilidad que necesitamos en el sector productivo para generar alianzas. Todas las redes requieren una base de confianza”, dijo el rector del plantel, Claudio Rojas, quien encabezó la jornada junto al vicerrector de Investigación y Postgrado, Hernán Maureira.
La directora de la DIDTT, Fabiola Loyola, destacó el crecimiento de las unidades que conforman su dirección.
“Estamos muy orgullosos. Cuando comenzamos con la Oficina de Transferencia y Licenciamiento en 2011 teníamos un sueño que se veía lejano: conseguir al menos una patente de una innovación de nuestros académicos. Hoy tenemos ocho patentes concedidas y 32 solicitudes en proceso. La Plataforma de Innovación, que surgió con un proyecto InES, vino a fortalecer nuestro trabajo y ahora no cabe duda que nuestra universidad dispone de una gran capacidad de innovar, transformando crisis en oportunidades y adelantándose incluso a necesidades en pos del desarrollo de la región y el país”, sostuvo.
Paralelo al seminario -que contó con testimonios de referentes en el ecosistema de emprendimiento como Max Gallegos, director de Desarrollo Tecnológico de “Cobijo Sano”, y Vicent Clement, jefe de operaciones del Parque Científico de la Universidad de Valencia-, la UCM efectuó una feria, con más de 20 stands.
“Me pareció súper buena la instancia. Pude compartir con hartos emprendedores locales, académicos, estudiantes y empresas y conversar, ver y entender los emprendimientos con base científico tecnológica”, afirmó la directora ejecutiva de Hub APTA, Varinka Farren, quien ofreció una charla como mentora de emprendimientos y cambios de “mindset”.
El reciclaje como negocio rentable
Mateo Rubio, gerente general de “Cáscara Foods”, una startup que busca combatir el desperdicio de alimentos en Chile, reveló cómo pasó de una idea genial a un negocio rentable.
“Fue un proceso racional. Empezamos investigando un problema grande como el desperdicio de alimentos y poco a poco, a través de la investigación y el trabajo universitario, fuimos acotándolo hasta llegar al problema de los subproductos y pérdidas agroindustriales en la industria de los jugos”, aseveró.
Desde su creación hace seis años, Cáscara Foods ha reciclado más de 90 toneladas de fruta, recibiendo el Premio Nacional Avonni en 2019, en la categoría Alimentación Saludable.
“A nivel mundial se desperdicia hasta el 40% de los alimentos, lo que tiene un impacto ambiental gigante y un daño económico, porque son recursos que no se aprovechan para nada. Nosotros trabajamos con empresas agroindustriales que tienen pulpas de fruta y las transformamos en nuevos productos como suplementos y snacks, utilizando los nutrientes que están escondidos en estas materias primas que solían ser desperdiciadas”, puntualizó.
“El camino del emprendimiento no es fácil -agregó- y requiere mucha resiliencia. Lo bueno es que hay cada vez más apoyos, que vienen desde el Estado, las universidades y los mismos profesores a veces. Entonces, se puede.”
Crédito: Vicerrectoría de Investigación y Postgrado UCM.
