Experto UCM plantea la necesidad de resguardar el uso de las neurotecnologías en Chile
[responsivevoice_button voice="Spanish Latin American Female" buttontext="Escucha la nota"]Para el Dr. Boris Lucero, la legislación debe abordar los alcances que puede tener este tipo de información en ámbitos comerciales, militares y de seguridad, posición expuesta ante la Comisión de Desafíos del Futuro, Ciencia, Tecnología e Innovación del Senado.En la tarde del lunes 6 de septiembre se llevó a cabo la sesión telemática de la Comisión de Desafíos del Futuro, Ciencia, Tecnología e Innovación del Senado, espacio en el cual participó el Dr. Boris Lucero, director del Centro de Investigación en Neuropsicología y Neurociencias Cognitivas (CINPSI Neurocog) de la Facultad de Ciencias de Salud de la Universidad Católica del Maule (UCM), con el fin de conocer su opinión y la de otros expertos del país e internacionales, como el Dr. Rafael Yuste, en relación a la protección de la integridad y la indemnidad mental en Chile.
Precisamente en la cita, dicha comisión presidida por el senador Guido Girardi, buscó proponer la forma y modo de resolver las divergencias producidas en la redacción con ocasión de la tramitación del proyecto de ley que modifica el artículo 19, número 1°, de la Carta Fundamental, para proteger la integridad y la indemnidad mental con relación al avance de las neurotecnologías, para finalmente votar su aprobación o rechazo.
El doctor Lucero hizo hincapié en la necesidad de diferenciar los derechos fundamentales de casos particulares en el desarrollo científico y tecnológico aplicada ámbitos específicos de aplicación de la actividad cerebral o la información proveniente de ella "Lo importante es que se lleve a cabo con respeto a la vida y a la integridad física y psíquica que ya se encuentra consagrado en la Constitución de Chile y en declaraciones internacionales", indicó.
En su intervención el investigador de la UCM, planteó que el desarrollo en ese ámbito, al implicar investigación con seres humanos, se debe adscribir a lo planteado por la Ley 20120. Esta ya resguarda e incorpora el uso del consentimiento informado, por lo cual no sería necesario incorporar mención a dicho consentimiento en la carta fundamental asociada específicamente a los neuroderechos o la neurotecnología para el campo de la investigación científica.
"En esta sesión, sin embargo, adicionalmente planteé que es necesario evaluar, en artículos complementarios al discutido, la necesidad de resguardar no solo a los individuos mismos sino también a la sociedad respecto a uso de las neurotecnologías, por ejemplo, en ámbitos de aplicación comerciales, militares y de seguridad", sostuvo el experto.
La votación finalmente llevó a la aprobación definitiva del texto propuesto por la Cámara del Senado el cual establece que “El desarrollo científico y tecnológico estará al servicio de las personas y se llevará a cabo con respeto a la vida y a la integridad física y psíquica. La ley regulará los requisitos, condiciones y restricciones para su utilización en las personas, debiendo resguardar especialmente la actividad cerebral, así como la información proveniente de ella”.