Estudiantes de segundo año de las carreras de Ingeniería Civil Informática, Ingeniería en Construcción, Ingeniería Civil e Ingeniería Civil Industrial de la UCM.Una masiva presentación de soluciones a problemas locales haciendo uso de modelos matemáticos realizaron los estudiantes de 2do año de la Facultad de Ciencias de la Ingeniería de la Universidad Católica del Maule, actividad desarrollada el 13 de noviembre en el Campus San Miguel. En el marco del Módulo Integrador de Ciencias Básicas de las carreras de Ingeniería Civil Informática, Ingeniería en Construcción, Ingeniería Civil e Ingeniería Civil Industrial de los ingenieros de la UCM, estudiantes de segundo año, debieron proponer soluciones a problemas locales a través de la modelación matemática. En la ronda de evaluación, la Dra. Angélica Urrutia, decana de la Facultad de Ciencias de la Ingeniería de la UCM, explicó el sentido de la actividad, comentando que “Estamos aplicando la metodología STEM, que apunta a desarrollar la ciencia, la ingeniería y la matemática aplicada y estos módulos van en ese contexto, a que nuestros estudiantes vean cuál es el fundamento de la teoría que aprenden. Me he percatado que en algunos casos han aplicado física y matemática, atendiendo temas atingentes como son la ciberseguridad, la de optimizar de terrenos para la construcción, el cierre de IANSA y otras soluciones”, dijo. Sobre esta segunda versión del hito evaluativo, el Dr. Carlos Caamaño, académico evaluador de la Facultad de Ciencias Básicas del plantel complementó que “Trabajamos con ellos durante todo el semestre y hoy vemos el resultado final de todas las observaciones de cada grupo y veo que la presentación está llegando al objetivo que teníamos propuesto con este trabajo. La enseñanza de la matemática en ingeniería tiene que estar orientada en el ámbito del desarrollo de la ingeniería y de cada especialidad, por ello presentamos problemas asociados a cada carrera”, afirmó. Fueron un total de 32 equipos los que se presentaron, tema sobre el cual Pablo Orrego, estudiante de ingeniería civil industrial de la UCM, junto a su grupo compuesto por Rodolfo Lopez, Gerald Fernández, Gabriela Hernández y Florencia Benavente, abordaron el cierre y las consecuencias del cierre de IANSA de Linares, proponiendo salidas económicas alternativas para los trabajadores y agricultores relacionados a la producción que operaba ligada a la planta. “Es un problema que se viene dando desde hace varios años, pero en julio se generó un quiebre que significó el despido de 500 personas de un total de 4500 que trabajaban directa o indirectamente con la empresa. Realizamos dos modelos, el primero para ver qué negocios requiere hacer el agricultor para reemplazar la remolacha, y determinamos que podría ser la papa, el tomate o el arándano, y llegamos a la conclusión que el arándano es el que presenta más ventajas, calculando unas 20 hectáreas por persona. El segundo modelo matemático tiene que ver con la tasa de desempleo de Linares, post cierre de IANSA, y llegamos a una cifra de 9,7%. La diferencia con las estadísticas oficiales las atribuimos a factores externos”, sostuvo Orrego. “Es ideal que nuestra formación como ingenieros se base en este tipo de actividades, con visitas a terreno, charlas y ejercicios reales, al fin y al cabo, esa es la única forma que debemos aprender, ver en qué aplicaremos los conocimientos teóricos que nos entregan”, aseguró el futuro ingeniero de la UCM.