El académico de la Escuela de Pedagogía en Educación General Básica con Mención de la Universidad Católica del Maule sede Curicó, Alejandro Espinoza, dice que es necesario que la formación escolar contemple el uso de las nuevas tecnologías, para potenciar el aprendizaje de los niños y niñas del siglo XXI, cuya principal característica es ser nativos digitales.

La Consulta Nacional sobre el uso de celulares en los colegios del país, que está llevando a cabo el Ministerio de Educación, ha causado gran debate en torno a si se debe permitir que los estudiantes utilicen sus dispositivos móviles durante la jornada escolar o no.

Al respecto, el académico de la Escuela de Pedagogía en Educación General Básica con Mención de la Universidad Católica del Maule sede Curicó, Alejandro Espinoza, hace un análisis respecto del uso de estos aparatos tecnológicos en el aula. Y propone darles un uso positivo, con la finalidad de que sume a la formación que se entrega a los estudiantes.

“En ningún caso el uso del celular lo veo como una traba para el aprendizaje de los niños, tenemos que entender que hoy día estamos en un mundo muy tecnológico, por lo mismo no podríamos pensar que la tecnología hay que dejarla de lado. Creo firmemente en la idea de que las escuelas tienen que enseñar bajo la lógica de que estamos en el siglo XXI, donde la presencia de la tecnología, los medios de comunicación, las pantallas, son muy omnipresentes en nuestra sociedad, por tanto, las escuelas no pueden abstraerse de estar realidad”, comentó el docente UCM sede Curicó, Alejandro Espinoza.

Nativos Digitales

Según datos proporcionados a través del Censo Digital de VTR, a la edad de 9 años, siete de cada 10 niños ya cuentan con un celular propio, y tanto jóvenes como niños, dedicarían más de tres horas diarias al uso de los equipos.

“Si vemos a nuestros estudiantes dentro de la sala de clases, nos daremos cuenta que el 100% tiene celular, y esa realidad, hay que utilizarla de manera positiva y en beneficio de los aprendizajes. Hoy en día, nuestros alumnos son visuales, son nativos digitales, y el teléfono prácticamente es una extensión de nuestro cuerpo. Tal vez para los que somos adultos, nos cuesta más entender esta realidad, pero para mis hijos y esta generación post años 2000, es algo muy natural y propio”, sostuvo.

Una de las claves para utilizar de manera positiva los equipos celulares dentro del aula, sería formar a las nuevas generaciones de profesores en alfabetización de medios digitales. “Sin duda que hay una gran tarea, muchas de las carreras de formación de profesores, están actualizando sus mallas, pero muy pocas contemplan una alfabetización en medios”, acotó el académico.

El académico considera que uno de los desafíos que presentan en la actualidad es la formación de profesores con herramientas tecnológicas. “Mientras no demos ese paso, no podremos contar con profesores que eduquen en tecnología. Y sucede lo que vemos hoy, donde el uso del celular se ve más como una amenaza, que como una virtud”, puntualizó.

Reglas claras en el aula

Al mismo tiempo el docente destacó que es vital establecer reglas claras dentro del aula. Su uso no debe ser indiscriminado, sino guiado, para que permita complementar el contenido abordado durante la clase. “Tampoco nos vamos a poner una venda en los ojos si al estudiante se le deja libertad de uso del celular, es probable que termine en el WhastApp, en Facebook o Instagram, desconcentrándose del quehacer del aula”, explicó.

El primer paso para lograr este objetivo es establecer reglas, donde haya objetivos claros, específicos y delimitados, del para qué y por qué se utilizarán los dispositivos en el aula.  Existen muchas aplicaciones educativas, que permitirían complementar el aprendizaje de los contenidos de clases, entre ellas destacan ‘Leo con Grin: Aprender a leer’, ‘Aprender a leer con silabario’, ‘El Rey de las Mates’, entre tantas otras, que están disponibles para celulares y tablets.

Incluso, la chilena Komal Dadlani, desde el 2014 está revolucionando el aprendizaje de la ciencia, física, química y biología de una manera interactiva, a través de su aplicación Lab4U, donde se transforman los smartphones en verdaderos instrumentos científicos. Herramienta que ha servido tanto a docentes como estudiantes, que cuentan con laboratorios de bolsillo y accesibles para todos.

“Sin duda el uso de celulares no entorpece el aprendizaje de nuestros estudiantes, al contrario, suma, si sabemos cómo utilizarlos”, aseguró el académico. Y agregó que “La investigadora Española Clara Cordero, se declara 100% digital y dice que el teléfono debe ser parte del aula, pero con normas claras de convivencia que favorezcan el aprendizaje. Me sumo a sus palabras, hay que educar en su uso, jamás prohibir. El desafío es educar en medios tecnológicos, debemos entender que el futuro terminará siendo mucho más tecnológico de hoy”, puntualizó.

En esa misma línea ha decidido avanzar el rediseño curricular de la Escuela de Pedagogía en Educación General Básica con Mención Lenguaje y Comunicación de la UCM, que contempló un módulo donde se abordará temáticas sobre medios masivos de comunicación y nuevas tecnologías. “Nos planteamos incluir el uso del celular y aplicaciones educativas que se puedan incorporar en el área de lenguaje y medios de comunicación, que forma parte de las necesidades actuales en la formación de académicos”, puntualizó.