Tejiendo Redes UCM: el primer proyecto de apoyo en salud para artesanos del Maule
La Escuela de Terapia Ocupacional de la Universidad Católica del Maule en alianza con Servicio País y el Centro de Innovación Social de la Casa de Estudios, lideran la iniciativa que, en una primera etapa, involucra a las tejedoras de Quinamávida.
Son cuatro las generaciones que han mantenido viva la tradición del telar mapuche en el Maule, específicamente en la comuna de Colbún. Allí un grupo de 22 artesanas organizadas en la Asociación Nuevos Aires de Quinamávida trabajan para transmitir su legado a las nuevas generaciones, sin embargo, su salud se ha visto mermada.
Jéssica Díaz, presidente de la Asociación explicó que “nosotras recolectamos vegetales para poder teñir nuestras lanas así que hacemos mucho ejercicio, caminamos bastante y estamos mucho tiempo de pie tejiendo y por eso tenemos muchos dolores de huesos”, dijo.
Dada esa problemática, la Escuela de Terapia Ocupacional de la Universidad Católica del Maule (UCM) creó el proyecto Tejiendo Redes UCM. En alianza con el Centro Integral de Innovación Social de la misma casa de estudios y Servicio País de la Fundación Superación de la Pobreza, iniciaron la primera etapa que involucra promoción y prevención en salud.
Daniela Robles, directora de la Escuela de Terapia Ocupacional UCM explicó que en esta primera etapa “la idea es poder acercar a estudiantes de la carrera de manera voluntaria al trabajo comunitario y de promoción y prevención en salud que muchas veces realiza el profesional. Vamos a elaborar cápsulas audiovisuales que permitan acercar técnicas de autocuidado y su propia explicación de cómo llevar a cabo este procedimiento cada vez que sea necesario, de manera que podamos aportar a disminuir el dolor de muchas de las tejedoras y tejedores, pero también, prevenir molestias en quienes se están iniciando en el tejido, manteniendo vivo el legado de generación en generación”, comentó.
Para ello, Servicio País generó un diagnóstico inicial sobre los principales problemas de salud que presentan las artesanas. Al respecto Ana Espinoza, jefe territorial de dicha Fundación manifestó que las artesanas de Quinavámida “son parte de los tesoros del Maule y aún no han sido abordados de manera integral considerando que son nuestros artistas y que atesoran nuestra cultura. Esto también nos invita a pensar la región, a través de esta alianza, en otros espacios en los que trabajamos con agricultores y pescadores y creemos que este es el inicio de algo que traerá grandes beneficios a la comunidad”.
Se trata de una iniciativa de colaboración entre universidad, sector público y comunidad, que se orienta articular el conocimiento académico y el de las artesanas, con el fin de generar soluciones innovadoras que les permitan una mejor calidad de vida. Así lo explicó la directora del Centro Integral de Innovación Social UCM, Dra. Claudia Concha: “en la actualidad las universidades estamos desafiadas por el medio externo a poner al servicio el conocimiento que generamos en nuestras casas de estudios. Esta iniciativa que emprende la carrera de terapia ocupacional, es una muestra de que es posible articular el quehacer docente con los problemas del territorio y sus actores, favoreciendo espacios de diálogo y de reconocimiento que potencian procesos de aprendizaje colectivos. Actualmente son 24 estudiantes voluntarios de Terapia Ocupacional UCM quienes trabajan en la primera etapa del proyecto que, dependiendo de la situación sanitaria, podrá involucrar un trabajo presencial”, señaló.
“Esperamos que pronto la situación sanitaria nos permita salir a terreno que es uno de los pilares del trabajo comunitario. Proyectamos que este sea el inicio de una labor conjunta en la que los estudiantes puedan aprender haciendo y llevando sus conocimientos a la comunidad, aportando al desarrollo de capital social y la mantención de estos tesoros culturales como son el grupo de tejedoras y tejedores.”, manifestó la directora de Escuela.
La Dra. Paula Ceballos, decana de Facultad de Ciencias de la Salud UCM valoró la iniciativa. “El hecho de que una escuela tan joven como Terapia Ocupacional ya haya concretado alianzas con actores relevantes del entorno y motivado a sus estudiantes a participar como voluntarios, es un indicador de que nuestra comunidad interna ha hecho suyo el sello UCM de espíritu de servicio. En momentos tan complejos con el que vivimos actualmente producto de la pandemia, es muy relevante que la universidad esté presente en la comunidad para entregar un aporte real y concreto a actores sociales tan relevantes como nuestros artesanos”, puntualizó.
