Investigadora Leonor Cantera, referente iberoamericana en el ámbito de la violencia de género, estuvo en la Universidad Católica del Maule (UCM), dando charlas en relación a la temática.
Según los resultados del Sondeo Nro 4 “Violencia en el pololeo” realizado por el Instituto Nacional de la Juventud, de diciembre del 2016 -realizado en jóvenes entre 15 y 29 años-, una de las mayores causas de la violencia en el pololeo son los celos (49% mencionado), seguido del machismo en la sociedad chilena (40% mencionado) y el alcohol y drogas (37% mencionado).

Invitada a Chile por la VII Conferencia de Psicología Comunitaria, desarrollada los días 5, 6 y 7 de octubre en Santiago, la destacada investigadora Leonor Cantera, académica de la Universidad Autónoma de Barcelona y una de las mayores referentes iberoamericanas en el ámbito de la violencia de género, quien compartió en la Universidad Católica del Maule (UCM) en Talca diferentes charlas en relación a su área de investigación.

Su mirada respecto a la temática de género y violencia de pareja hoy, Cantera, expresó que “La violencia de género en la pareja lamentablemente es una problemática social universal y en algunos países le han puesto atención por las circunstancias que sean más prioritarias que otras. En Chile veo un trabajo sobre la necesidad de incorporar la perspectiva de género y de trabajar con las problemáticas que afectan a las mujeres en términos generales. Una de ellas es la violencia de género en la pareja, la que desgraciadamente se pensaba que era un asunto de personas mayores pero cada vez más se ve presente en toda la sociedad”, afirmó.

Sobre la violencia en la pareja, la experta indicó que a nivel social es importante no centrarse en la persona, sino que debemos preocuparnos en “Cómo las estructuras sociales están a merced de poder propiciar relaciones más igualitarias. Cuando la educación es desde el principio más equitativa e igualitaria ayuda a prevenir relaciones de desigualdad, aplicable a todas las esferas, como son las leyes, las mismas relaciones en las iglesias y otras, que todas las estructuras puedan ir presentando modelaje de relaciones diferentes que contribuyan a que vivamos un poco más con igualdad que no existe”, expuso.

Cuando un problema surge y no se le da respuesta social, ni se sabe dar una respuesta individual inmediata, explicó Cantera, “Muchas veces tiene que pasar a la parte jurídica, lo que no es una solución al problema, es una forma de respuesta a una problemática que puede convertirse en delito. La violencia de género en España es un delito, por ir en contra de los derechos humanos de las personas puede traer graves consecuencias en diferentes niveles. Previo a que lleguemos al delito, tratemos de evitar que no se dé, por eso la importancia que hacen las escuelas de instaurar programas que estén dirigidos a la igualdad”, detalló.

Animarse a denunciar

Varios casos de esta índole han sido destacados ante la opinión pública por la incapacidad de respuesta adecuada a las denuncias, tema que podría haber evitado muertes de personas afectadas, y por esto, a juicio de la experta necesariamente “La denuncia tiene que ir acompañada de recursos, de lo contrario la persona maltratada en una relación no irá a buscarlo, porque las consecuencias de estar son mayores que salir, puesto que cuando una mujer presenta una denuncia el hombre se enoja mucho más y existe la posibilidad de muerte”, dijo.

Sobre cómo romper el círculo de la violencia, la psicóloga fue clara en indicar que “Para salir de un ciclo de violencia es necesario el darse cuenta primero que estás en ese problema. Tenemos a nivel social y universal instaurada la idea de que la violencia es algo normal y natural propio de las relaciones de pareja y por eso se hace difícil identificarla. Para ello requerimos de ayuda externa y que no tiene que ser necesariamente ir a un profesional, puede ser una película que se vea y eso detona buscar ayuda, o en otros casos la situación puede ser tan grave que la policía se presenta en tu casa por llamado de terceros que alertan sobre la situación, como son vecinos o el círculo cercano. Eso da la dinámica de poder salir. Cuando no es así, las amistades y la familia deben estar presentes”, indicó.

A lo anterior, Cantera agregó que a nivel social se tienen preconcebidas ciertas ideas tales como “El hombre es mi marido y lo que él mande yo obedezco”, creencias que confunden el respeto por la obediencia y las relaciones de poder por relaciones de dominio. “Previo incluso a entrar a una relación muchas personas tienen esas concepciones sobre lo que debe ser una relación. Si uno tiene esa idea encaminada sobre que el otro es superior a mi o le debo obediencia, ya de entrada estamos estableciendo un tipo de relación desigual y por eso el trabajo es largo y tendido”, puntualizó.