Proyecto Brotes de la UCM benefició a estudiantes del Colegio Arte y Cultura de Curicó
La iniciativa que comenzó a ejecutarse en el 2017 en Talca, apoyada por fondos concursables de la Dirección General de Vinculación, este año también se llevó a cabo en Curicó y permitió que estudiantes voluntarios de la Universidad Católica del Maule, pudieran apoyar las clases de Lenguaje y Comunicación e Inglés.
El Proyecto Brotes finalizó con éxito su intervención en el Colegio de Arte y Cultura San Antonio de Curicó. En total, fueron nueve los estudiantes de la Universidad Católica del Maule que, de manera voluntaria, brindaron apoyo en las clases de este Colegio.
Al respecto, Esteban Núñez, coordinador del Proyecto Brotes UCM Curicó, dijo que “La experiencia fue muy enriquecedora, pudimos apoyar a un grupo de 11 estudiantes de quinto año en sus clases de Inglés y a 10 estudiantes de séptimo básico en clases de Lenguaje, eran grupos pequeños pero que requerían mucha atención, por lo que la ayuda de nuestros voluntarios fue significativa durante las horas de clases”, indicó.
Quien también se mostró agradecida por la iniciativa de la UCM fue Olga Mardones Valenzuela, directora del Colegio Arte y Cultura San Antonio. “Es un gran aporte lo que realiza el Proyecto Brotes UCM con los establecimientos, es primera vez que nosotros participamos, y agradecemos profundamente el tiempo que se dan los voluntarios de venir y acercarse a las escuelas, trabajar en reforzamiento, donde lo necesitamos. Nosotros no tenemos Inglés desde primero en adelante, sino que desde quinto año, y es necesario que existan estas intervenciones, sobre todo desde el ámbito social, que es lo que se necesita reforzar”, mencionó.
Trabajo voluntario
En el 2017 comenzó a ejecutarse el Proyecto Brotes UCM y se realizó solo en Talca durante dos años. Este 2019, por primera vez llegó la iniciativa hasta Curicó. Rocío Campos Herrera, estudiante de Pedagogía en Educación Básica con Mención, fue una de las estudiantes de la UCM, que de manera voluntaria asistió cada martes al Colegio Arte y Cultura San Antonio.
“Fue una bonita experiencia porque es distinto a las prácticas profesionales que realizamos en nuestra carrera. Nosotros apoyábamos el contenido que la profesora enseñaba durante la clase. En mi caso, reforzaba la clase de lenguaje”, comentó.