Presidenta subrogante del CEC: “Nuestro desafío es mantener los tiempos de respuesta y la calidad”
En entrevista la Dra. Vivian D’Afonseca Da Silva repasó los principales tópicos expuestos en la Cuenta Pública del Comité de Ética Científica (CEC-UCM).
La académica perteneciente a la Facultad de Medicina es la actual presidenta subrogante pertenece al Comité de Ética Científica desde el 2020, fue parte de la directiva como vice-presidenta, hasta que hace pocos meses asumió la presidencia subrogante, por lo que aclaró que todo lo expuesto en la reciente cuenta pública, fue encabezado por el académico Dr. Marcelo Correa presidente y la Dra. Mariana Lazzaro Salazar, vice-presidenta del año 2021.
Entrando en materia de lo que fue la cuenta pública del CEC, ¿Qué fue lo que presentaron a la comunidad?
Comenzamos destacando que el año pasado se revisaron 88 proyectos, ingresaron 94, pero seis de ellos no fueron adjudicados por lo que no necesitó de nuestra revisión. Probablemente por los desafíos generados en la pandemia hubo una rebaja en la cantidad de proyectos en comparación al año anterior de 29%, es decir, fueron 40 proyectos menos que recibimos.
Un logro que tuvimos el año pasado como Comité de Ética, fue obtener nuevamente nuestra acreditación, la que ya se había obtenido en el 2018 y al final del año pasado salió la re-acreditación, que refuerza nuestro compromiso por velar por la ética de nuestras investigaciones y da cuenta que estamos cumpliendo con los estándares requeridos para tener un CEC reconocido nacionalmente.
¿Por qué es tan importante que la UCM cuente con un CEC robusto?
Conforme los trabajos van incrementando los niveles de complejidad, se requiere de ciertos ajustes, fue así que, con el avance científico en los últimos años presentado por la Universidad en términos de investigación, se hizo necesario que nuestro Comité pudiera estar a la altura de ese avance, cumpliendo con los estándares éticos exigidos nacional e internacionalmente. Como consecuencia de ese avance, ha incrementado la calidad de las investigaciones y el número de proyectos que llegan a revisión, entonces el Comité reafirma su compromiso de velar por el bienestar de los participantes y apoyar que los proyectos tengan ese resguardo ético, cuando hay que investigar con personas.
Es bueno aclarar que los procesos de revisión ética son procesos cuidadosos y pueden demorar más que la revisión de otros tipos de proyectos; sin embargo, tenemos plazos legales para revisión y respuestas, lo que siempre intentamos cumplir a cabalidad.
¿Cómo abordaron como CEC la emergencia sanitaria, considerando que muchas investigaciones pudieron verse alteradas por los encierros y cuarentenas?
El trabajo fue bien complejo porque la pandemia trajo muchos desafíos para nosotros como CEC, ya que, por ejemplo, en el 2021, los investigadores pudieron retomar la presencialidad de manera gradual, con restricciones, dependiendo de las indicaciones del Plan Paso a Paso, impulsado por el Ministerio de Salud. Eso hizo que tuviéramos que hacer nuevos ajustes, como hacer que los documentos legales, tales como el consentimiento informado que se le aplica a los participantes de una investigación, fueran online, lo que se comenzó a implementar en el 2020 y continuó en el 2021. También dentro de nuestra revisión tuvimos que considerar los lineamientos sanitarios que iba dando la autoridad.
Ese fue uno de los mayores desafíos para la Universidad, el que sus investigadores pudieran asistir presencialmente a sus estudios y por eso creo que hubo esa disminución de proyectos revisados, en comparación a los años anteriores
¿Cuáles son los desafíos que se plantean en el corto plazo?
Estamos trabajando en los tiempos de respuestas y aunque no fue abordado en la cuenta pública, puedo adelantar que se están desarrollando formularios online, que contendrán los tópicos más importantes que revisamos, por lo que los/las investigadores/as puedan abordar todos los puntos necesarios para la revisión ética.
Nosotros ya detectamos las principales fallas en los envíos de documentos de los proyectos que evaluamos, por lo que el formulario nos ayudará a regularizar este punto y hacer más eficiente los envíos al CEC. Esto probablemente empezará a realizarse a comienzos del próximo año, lo que facilitará mucho el proceso de revisión.
También estamos trabajando para mejorar la comunicación con los/las investigadores/as y comunidad académica, para solucionar dudas antes o en cualquier momento de revisión de sus proyectos. Es que estamos conscientes que cada vez más se incrementará el número de proyectos y con ese aumento, tenemos la tarea de mantener los tiempos de respuestas y la calidad de la revisión ética. Para que tengamos una idea, hasta la fecha, se han ingresado cerca de 150 proyectos durante el 2022, es decir, casi el doble de los proyectos del año pasado.}
Con tanto proyecto por revisar… ¿Cómo lo hacen para dar respuestas en los tiempos comprometidos sin perder calidad?
Es un esfuerzo muy importante el que realizamos todos los integrantes del CEC, para poder cumplir con los tiempos de respuesta. Existen situaciones donde sesionamos de manera extraordinaria para cumplir con plazos y con la demanda de revisión que nos llega. En lo que se refiere a calidad, nuestro comité es muy diverso; tiene integrantes de los más variados campos de investigación, además de tener personas calificadas para hacer evaluación bioética y también contamos con un representante de la comunidad que no está tan vinculado con la investigación, por lo que entrega una mirada distinta en el momento de evaluar proyectos, lo que es muy importante.
En el 2021, cuatro investigadores nuestros se capacitaron en discernimiento bioético, lo que es muy importante porque el CEC tiene el cuidado de que todos los revisores tenga todos los pilares éticos dentro de su conocimiento, para poder hacer una revisión de un proyecto.
Por último, en esta revisión de proyectos… ¿Qué porcentaje de aprobación tienen?
La gran mayoría son aprobados, aunque no es frecuente que un proyecto se apruebe en la primera revisión; generalmente nuestra resolución es aprobado con observaciones y después que se corrigen estas, el proyecto es aprobado. Los que son rechazados se pueden replantear y volver a enviar. Que esté en esa condición, no quiere decir que jamás se van a poder ejecutar, sino que no presentan los elementos éticos necesarios para proteger a los sujetos de investigación, por lo que cuando rechazamos, enviamos nuestras observaciones, para que el/la investigador/a pueda ajustarlo. Es importante destacar que todos los proyectos de investigación que se generan al interior de la UCM (tesis de postgrado, proyectos internos y adjudicados con financiamiento) que involucren personas, deben pasar por la evaluación del CEC para cumplir con las normativas nacionales e institucionales de ética de la investigación.