El vínculo que se ha generado entre los establecimientos y las alumnas UCM, ha permitido que participen de distintas actividades como clases directas en Zoom, envió de cápsulas educativas.

La creación de infografías, participación en reunión de apoderados y de equipo con los centros de práctica, además de la entrega de canastas Junaeb y kids educativos, donde han establecido conexión a través de plataformas digitales con la comunidad, han sido parte de las tareas que están desarrollando estudiantes de Educación Parvularia de manera remota.

Es que la pandemia por COVID19 no ha sido un impedimento para que las estudiantes de la Escuela de Educación Parvularia de la Universidad Católica del Maule sede Curicó realicen su Práctica profesional. Al contrario, han sabido adaptarse a las nuevas condiciones y se encuentran desde hace meses trabajando de manera remota en centros de Junji, VTF, municipales, subvencionados y particulares de Talca, Curicó, Molina, Lo Valdivia y Rauco, llegando a más de 950 niños y niñas de los niveles sala cuna, medio y transición.

La vinculación que han logrado con los padres y apoderados, así como también con los equipos de profesionales de los centros, les ha permitido, además, ser parte de diferentes actividades, como fue la entrega de kids educativos y canastas Junaeb en el jardín infantil Big- Bang de Curicó.

Se instalaron proyectores, donde se podía ver a las estudiantes ser parte de la ceremonia, de manera remota, pero en directo, posibilitando la interacción entre ellas, las educadoras guías y familias.

La académica de la Escuela de Educación Parvularia de la UCM sede Curicó, Lorena Garrido, dijo que “Esta experiencia es fundamental en el proceso de formativos de las estudiantes, ya que como educadoras de párvulos debemos estar preparadas para trabajar no solo con niños y niñas, sino que también, con familia y comunidad. Hoy en contextos de pandemia y suspensión de actividades escolares, este trabajo se había vuelto complejo de realizar por nuestras estudiantes, más, esta posibilidad que nos brinda el Jardín Big Bang, nos abre una puerta de entrada para que las estudiantes puedan demostrar sus competencias profesionales en todas las líneas de acción esperadas”, explicó.

“Personalmente, como tutora de prácticas y coordinadora de esta etapa dentro de la carrera de Educación Parvularia con mención de la UCM, me siento muy orgullosa de ser parte de esta iniciativa, donde es importante mencionar, que surgió en un 100% de la directora el jardín infantil Big Bing, Maryoriette Hermosilla, quien es ex alumna de carrera y sabe los desafíos que implica una práctica profesional, por tanto, logró ser empática y junto con ello, se volvió en un agente activo en la formación de nuestras estudiantes”.

Y agregó que “La formación en servicio es clave en todas nuestras estudiantes de educación parvularia de la UCM. Ellas están haciendo un enorme esfuerzo para brindar cariño, compañía y distintos saberes a los niños y niñas que hoy se encuentran en sus casas por el tema de la pandemia por COVID19. Están desarrollando distintos tipos de experiencias de aprendizaje a través de capsulas educativas, infografías, kids educativos que se entregan a las familias junto con las canastas de alimentación. Siempre desde un enfoque lúdico y creativo, partiendo claramente desde la contención y el apego a los niños, niñas y sus familias”.

En tanto, la directora Jardin Junji Big – Bang, Maryoriet Hermosilla, comentó que “Las estudiantes se han incorporado de excelente manera a la gestión de nuestro establecimiento, asumiendo con valentía los desafíos educativos que el contexto de país actual les ha presentado, es por esto que como comunidad educativa Big – Bang, asumimos con profundo compromiso el apoyarlas en este camino, dado que ellas serán las profesionales que el día de mañana estarán junto a nosotros liderando procesos educativos”.