Opinión: Reciclemos y reutilicemos con los niños en cuarentena
Dra. Sandra Castro Berna, académica de la Escuela de Educación Parvularia de la Universidad Católica del Maule.
Esta semana celebramos el día del reciclaje, fecha que nos recuerda que hay muchos sobrantes en casa que se irán a la basura y contribuirán a la contaminación de nuestro planeta. Les presento una idea que ya no es novedosa como tal, pero si puede ayudar a darle una segunda oportunidad a los materiales desechables caseros, que pueden brindar momentos de diversión y despliegue de creatividad en familia y a fomentar una cultura más ecológica.
A todos los niños y niñas les gustan muchísimo los juguetes de todo tipo, y los materiales desechables pueden ser una gran oportunidad para ellos, ya que disfrutan de lo sencillo, les atraen las cosas simples, les gustan las sensaciones nuevas, pueden imaginar, crear, sentir que tienen nuevos desafíos. Por ejemplo: una caja grande puede ser una casa, un automóvil, un fuerte, un castillo, una entrada mágica, entre tantas otras opciones.
El niño va a confeccionar sus juguetes o elementos de juego, hará sus propios diseños de juguetes, y los elaborará a su ritmo y de acuerdo a sus posibilidades, permita que trabaje solo y espere ser invitado. Si lo invitan déjese llevar y siga las indicaciones.
Estos materiales son medios para experimentar sin límites, les brindarán diversas experiencias, favorecerán la expresión de sentimientos, beneficiarán las relaciones sociales, y mejor aún, desarrollarán habilidades creativas e imaginativas en sus hijos.
Dentro de los materiales reciclados, son ideales para trabajar en familia aquellos de origen artificial, como envases de plástico, tubos de papel higiénico y toalla de cocina, tapas, cajas de cartón y tetra pack (leche, jugos, yogurt), palos de helados, cucharas de plástico, papeles de colores o de diarios y revistas, vasos y platos de cartón o plástico, botellas, chapas, géneros, cajas metálicas, cuerdas, entre otros. Los cuales son una fuente inagotable a merced de la creatividad de sus hijos, y son baratos, sólo hay que agregar un poco de pegamento, scoch, tijera, pinceles y pinturas si lo requieren.
Los niños(as) no controlan bien sus movimientos y su fuerza, pueden romper los materiales reciclados o las confecciones; si ocurre así, la solución es reemplazarlos, tomar otros y ya está. Además, al ser de bajo costo y estar a fácil disposición en las casas, evitan la frustración del menor si se malogran.
Cuando trabajen transmita a los niños(as) la importancia del reciclaje, la reutilización de elementos y objetos de distinto tipo, que de otro modo serían desechados y tirados como basura que tardarán cientos de años en degradarse.
Poco a poco y con pequeñas acciones, el adulto irá provocando mayor sensibilidad en cuestiones medioambientales en los niños(as), debe proporcionarles variadas experiencias que les permitan conocer cada vez más sobre la influencia humana en el cuidado del planeta y ayudarles, a reflexionar en torno a la responsabilidad que todos tenemos en ello.
“Las opiniones vertidas en esta columna son de exclusiva responsabilidad de quienes las emiten y no representan necesariamente el pensamiento de la Universidad Católica del Maule”.