Osvaldo Jirón Amaro, docente UCM.

En el plantel se realizó la charla Mi Amor por la Pedagogía, con estudiantes de tercero y cuarto medio del programa de atracción de talentos en la disciplina.

En dependencias del Campus San Miguel de la Universidad Católica del Maule (UCM), se realizó la segunda charla de 2018 del ciclo de conversación dialógica “Mi amor por la Pedagogía”, actividad que tuvo como expositor al reconocido profesor talquino Osvaldo Jirón Amaro.

Organizada por el Programa de Atracción de Talentos en Pedagogía (PAT) del Centro de Apoyo al Aprendizaje (CAP UCM) del plantel, esta actividad, que se viene desarrollando desde 2016, “Es un espacio de reflexión en el cual tenemos como invitados a profesores con trayectoria destacada, quienes en conjunto con los jóvenes del programa dialogan respecto del rol del docente en nuestra sociedad”, manifestó la coordinadora del programa, Karen Gajardo, agregando que “Es una instancia significativa e importante, porque le damos mucho valor a la experiencia, es una de las bases de nuestro programa, el aprender de los otros”, dijo.

Osvaldo Jirón es casado, con dos hijos y una nieta, profesor de Educación Física, licenciado en Educación, magíster y con estudios de doctorado. Aseguró que entró a estudiar pedagogía aunque sus padres se oponían y le decían que buscara otras alternativas.

“Tenía ganas de estudiar odontología, pero no quedé, y una de mis opciones era estudiar pedagogía, a pesar que mis papás me recomendaban escoger otra cosa. Finalmente entré a la UCM, carrera que recién comenzaba, siendo la tercera promoción de egresados. Estando en los primeros años y habiendo muchas necesidades de profesores de Educación Física en la zona, fui ayudando voluntariamente a compañeros de cursos superiores, lo que me permitió acercarme lentamente a la pedagogía y reafirmar mi vocación”, recordó.

Tuvo una dilatada trayectoria como profesor, tanto en el sistema escolar como en la academia universitaria. Comenzó trabajando en dos establecimientos de sectores vulnerables de Talca, relató, para luego hacer su práctica profesional en el Colegio Integrado de la misma ciudad, lugar en el que después se quedó como docente, en 1975, llegando a ser director del área de Educación Física, subdirector, director de enseñanza media en el año 89 y, posteriormente, director de básica, desde el 92 al 94.

“Me integré a un cuerpo docente joven, con un gran liderazgo de los directivos de la época, situación fundamental en el desarrollo de los profesores: el liderazgo del director. El profesor no hace solo las cosas, necesita de alguien que lo apoye en sus iniciativas y su creatividad. Busquen un buen líder y van a ser excelentes profesores”, recalcó a los estudiantes de tercero y cuarto medio que escucharon atentos su charla.

En cuanto a su trayectoria universitaria, en 1989 se integró como profesor por horas a la UCM, donde pasó a jornada completa el año 95, ocupando los cargos de director del Departamento de Deportes y del Club Deportivo, director de escuela por dos periodos, secretario de la facultad, decano interino, y posteriormente director general de vinculación y delegado de rectoría para la gestión institucional, acogiéndose a jubilación en marzo de 2018.

Sobre la pregunta ¿por qué ser profesor?, Jirón reconoce que “El escenario de la educación en el país es difícil, por lo que hoy más que nunca se necesita una escuela como institución, y los profesores, como actores importantes, hay buscar la forma para que la educación, a través del conocimiento, permita crear las mejores condiciones para el desarrollo del ser humano y constituirse en un aporte real al desarrollo de la sociedad”, cerró.

Dejar huella

Diversas reacciones generó la historia de vida del profesor Jirón en los jóvenes que respetuosamente escucharon cada una de sus palabras.
Martín Montero, del Liceo Pablo Neruda de Talca, dijo que aprendió que “El profesor tiene las herramientas para impulsar el desarrollo del estudiante y en parte es responsable de cambiar la mente de una persona, con el comportamiento, acciones, etc.”, dijo.

Asimismo, Tatiana Almuna, del Instituto Comercial de Linares, expresó que para ser un buen profesor se debe buscar “Ser cercano, respetuoso y entregar conocimientos a todos por igual”, añadiendo que “Ser un buen docente no es solo enseñar, es dejar una marca positiva en las personas a mi alrededor”.