Su curva de incremento es exponencial. Los expertos dicen que cada paciente puede transmitir el virus a 2,2 personas.

El Covid-19 declarado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una pandemia y la reflexión que debemos plantearnos es qué tan seriamente estamos tomando esta situación.

La información entregada por la autoridad de Salud a nivel nacional y local ha sido muy clara y apunta a no generar alarma, pero si a crear conciencia en la necesidad de tomar las medidas de precaución que se han difundido e intensificado al haberse confirmado la fase 4 en Chile.

Esto porque el coronavirus se propaga rápidamente y las personas de más de 80 años tienen un porcentaje mucho mayor de posibilidades de morir, de alrededor del 15% (personas de 70-80 = 8%; 60-70 años = 3.6%, 50-60 años = 1.3%, hasta 50 años = menos del 0.4%). En el caso de pacientes con condiciones de salud preexistentes, los porcentajes son: enfermedad cardíaca = 10%, diabetes = 7%, por ejemplo.

“El problema es que incluso los más jóvenes, quienes tienen una incidencia muy baja de muerte, pueden propagarla a las personas que tienen una mayor incidencia de complicaciones y muerte. Por esta razón, se deben tomar más precauciones. Además, COVID19 es altamente contagioso, la persona puede transmitir el virus antes de que los síntomas sean visibles, el tiempo de contacto con esta persona no tiene que ser largo. Los casos confirmados muestran una curva de crecimiento exponencial. Los expertos dicen que cada paciente puede transmitir el virus a 2,2 personas. El Dr. Marc Lipsitch, un científico de Harvard, predice que entre el 40 y el 70% de las personas en todo el mundo podrían contagiarse con COVID19”, advirtió el investigador de la Facultad de Medicina UCM, Dr. Matthias Piesche.

Por este motivo es que este evento ha sido calificado como pandemia, ya que una “epidemia es un evento de una enfermedad activa que aumentó repentinamente, pero es principalmente local, no muy extendida, mientras que la pandemia significa que la enfermedad se ha extendido globalmente a varios países, afectando a muchas personas”, explicó el Dr. Piesche.

Esta denominación no indica nada sobre la tasa de mortalidad especifica el investigador, “Por ejemplo, el ébola se considera epidémico porque fue local, no de amplia propagación, sin embargo, tenía una alta tasa de mortalidad, 40% de los pacientes infectados murieron. Por el contrario, COVID19 ahora se considera una pandemia porque está presente en muchos países del mundo, pero la tasa de mortalidad es del 2-4%. Todavía alrededor de 20-30 veces mayor que la gripe, que tiene una tasa de mortalidad del 0,1%”, puntualizó.

Para evitar el contagio

Aunque ya han sido expuestas masivamente, es fundamental tomar en consideración seriamente las recomendaciones entregadas por las autoridades de Salud.

Estas son: evitar apretones de manos, besos al saludar a otras personas y en lugar de ello asentir, saludar o inclinarse. Evite tocarse la cara, nariz, ojos, boca. Evitar contacto cercano (distancia de 2 m).

Lavarse bien las manos con jabón (30 segundos) y solicite a sus invitados que hagan lo mismo cuando visiten su hogar.

Limpie y desinfecte diariamente las superficies que se tocan con frecuencia (manillas de las puertas, mesas, muebles de la cocina, grifos, interruptor de luz, inodoros, teléfonos celulares.

Cubra su boca cuando tosa, no con la mano, sino que con la parte interior del codo. Tire los pañuelos usados ​​a la basura, no reutilizar.

Evite grandes multitudes (más de 100 personas, por ejemplo, cine, teatro, juegos de fútbol, baloncesto, etc.).

Si usted o alguien de su familia está enfermo, use una máscara, pero si está sano esta precaución no es necesaria.

Si muestra síntomas (tos, fiebre mayor a 38°C, malestar general) hay que permanecer en casa y comunicarse con la autoridad sanitaria.