“La democracia es un acto que se aprende y se defiende con participación”
Entrevista al académico, Alejandro Villalobos Martínez, doctor en historia, y académico de la Facultad de Ciencias de la Educación UCM.
Importantes lecciones dejó el plebiscito constitucional del pasado 25 de octubre, tanto por la alta participación de la ciudadanía en esta nueva demostración de democracia, con más de 7 millones 500 mil personas que expresaron su opinión, y otros temas, que repasamos ahora en entrevista con el Dr. Alejandro Villalobos, doctor en historia y académico de la UCM, quien afirma que son las instituciones educativas las responsables de promover la participación en la sociedad, enseñar a ser demócrata y también a defender la democracia.
El pasado domingo 25 de octubre, después de una intensa jornada electoral, la mayoría de los chilenos manifestó estar a favor de una nueva Constitución, según el escrutinio definitivo. El Apruebo se impuso con un 78%, frente a un 21% de rechazo.
¿Qué aristas son importantes de analizar en relación al plebiscito?
Considero, desde mi perspectiva de análisis histórico, que el nivel de participación electoral representa claramente una renovación en el compromiso de la ciudadanía con la democracia. Hay en esto dos elementos muy importantes, el primero es que el patrón electoral seguro reflejará que el mayor número de votantes son menores de 30 años, lo cual no se veía desde el plebiscito del año 88, y también hubo alta asistencia de las personas de la tercera edad, mientras que la generación que está entre los 40 y 50 años no cree en el cambio. Otro elemento, es que participó más del 50% del padrón electoral en medio de una pandemia y con voto voluntario. Lo cual como dije demuestra que hay una renovación del electorado la generación que está entre los 40 a 50 años pertenecen a un modelo ciudadano que se agotó y que la clase gobernante no creen en el cambio. La última vez que ocurrió alta participación fue en el año 2012 para elecciones presidenciales, pero con otro sistema que era inscripción voluntaria y voto obligatorio, entonces claramente representa una renovación del patrón electoral nuevos Bríos nuevas fuerzas electorales.
¿Cómo nacen estos procesos?
Es bueno aclarar que no nace producto de la violencia, nace de la madurez ciudadana, de la capacidad crítica de los chilenos de analizar su entorno. Hay que entender que el país quiere dar un paso adelante para consolidar una sociedad más justa. Estamos frente a una sociedad que visualizo que ha madurado al menos con respecto a defender sus intereses. Estamos claros que la Constitución no le va a mejorar la vida a los chilenos de la noche a la mañana, pero le va a permitir a Chile, proyectarse para los próximos años con justicia social y derechos garantizados. Este proceso no es una varita mágica, pero es un proceso constituyente que tiene que ser la hoja de ruta entre la ciudadanía y la clase política. Hay gente que dice que no quieren a la clase política, pero la necesitamos, para que se consolide la democracia. Yo espero que la clase política comprenda que la ciudadanía les va a juzgar por su compromiso global, y no sigan defendiendo su trichera, sus intereses.
¿Cómo debería Chile proyectarse a partir de este proceso?
Probablemente se tarde dos años en elaborar la Constitución, pero esta constitución va a preparar todo para los próximos 100 años. Tampoco coincido con algunas declaraciones que dicen que este plebiscito para aprobar una nueva Constitución se debió haber hecho hace 30 años atrás, cuando los chilenos retornábamos a la democracia, en esa oportunidad no se podía, porque teníamos a los militares muy alerta, casi con amenazas concretas que podían volver al poder por medio de fuerza. Además, además no existían las voluntades políticas, tanto de derecha como de izquierda. Así que, desde mi punto de vista, estoy convencido que la clase política tiene la responsabilidad con el electorado, tienen que ser una clase política responsable y generosa que actúe por el bien del país.
¿Implica recuperar los acuerdos y evitar la polarización?
Urge que se establezcan acuerdos entre todos los actores políticos que traten de generar puentes y que dejen de tener la idea que tienen la verdad absoluta. Realmente, eso es lo que le ha hecho daño a nuestro país. Que la clase política ha sido incapaz de generar puentes entre todos los actores sociales. Entonces, se espera que con los resultados del plebiscito, la clase política sea capaz de entender y que valore la democracia, que dejen de creer que todavía se pueden hacer proyectos excluyentes.
Otra cosa que se puede ver es que hoy día la democracia representativa está en crisis, y han aparecido otros actores que buscan tomar decisiones e instalar opinión pública, a generar debate, ese actor ha sido calle, pero la calle también es peligrosa, porque muestra que la clase política no ha sido capaz de escuchar, de permitir la participación. La calle es insuficiente.
Entonces ¿Cuál sería su respuesta?
Mi opinión es que, nosotros como Universidad, y es lo que hacemos desde la Facultad, preparar, formar a quienes tienen la responsabilidad de educar, pues en la educación está la clave para revertir las debilidades de nuestro sistema, que debe sustentarse en la ciudadanía. Necesitamos una Educación para la ciudadanía, necesitamos que en las escuelas se construyan sistemas democráticos, por ejemplo que en los planes de estudios de todas las carreras universitarias se incorpore esa temática como lo es la formación para la ciudadanía. (…) Ayer, se cierra el ciclo del legalismo que dejó instalado el gobierno dictatorial, comienza a cerrarse esa puerta, pero si no se abre otra puerta, donde todos los ciudadanos participemos de los cambios no se habrá logrado nada. Aquí está la clave.
¿Cómo valora el hito del plebiscito del 25 de octubre?
Vuelvo y repito, este plebiscito es un hecho histórico, por primera vez una ciudadanía va a tener la posibilidad en la historia de Chile de participar en un proceso Constituyente abierto y democrático, la historia constitucional Chile parte de por allá por 1812 con el reglamento constitucional provisorio, que rigió en Chile entre 27 de octubre de 1812 hasta el 6 de octubre de 1813, y nunca la ciudadanía había participado de una constituyente. Por eso es fundamental que la clase política escuche a la ciudadanía, para proyectar al país para los próximos 100 años. Creo que esto va a ser relevante en la medida que se siga trabajando para una formación ciudadana transversalmente en las instituciones de educación, no basta con que nos sintamos orgullosos por haber ido a votar, de participar de un proceso electoral, se debe ser demócrata toda la vida, la democracia es un acto permanente, la democracia se aprende desde la escuela a la universidad. La democracia es un acto que se aprende y se defiende con participación.
¿Cómo piensa la nueva Constitución?
A lo mejor vamos a lograr construir en dos años una carta fundamental , pero he aquí la responsabilidad, por ejemplo de los educadores de los futuros pedagogos y los que ya están en ejercicio, de entender que escuela tiene que ser un espacio donde se genere participación de la sociedad, tiene que existir horizontalidad en las formas de participación, no es que todos seamos iguales, sino más bien que todos podemos construir un país de mejores condiciones y ese es también un deber ser de las instituciones de educación superior en cómo construir participación ciudadana (…) Hoy día te encuentras con generaciones de personas entre los 40 y los 50 años que no aprendieron el valor de la democracia y lo comprenden solamente como ir a votar, pero la democracia es un acto permanente.