Instalando una cultura de altas expectativas en la educación: Inspiración para futuros docentes del PAT UCM
Más de 60 jóvenes de tercero y cuarto medio participaron en el taller online liderado por la ganadora del Global Teacher Prize 2022.
“Ser profesor es más desafiante que trabajar en la NASA”, fue la impactante afirmación con la que María Francisca Elgueta, profesora de educación media, licenciada en Historia y ganadora del Global Teacher Prize 2022, dio inicio al taller titulado “¿Cómo instalar una cultura de altas expectativas?”, organizado por el Programa de Atracción de Talentos (PAT) del Centro de Apoyo al Aprendizaje (CAP) de la Universidad Católica del Maule (UCM).
Palmenia Pinochet, jefa interina del CAP, abrió el evento agradeciendo el compromiso de los estudiantes asistentes. “Su motivación para conectarse a esta actividad refleja su deseo de transformar la educación. Como futuros educadores, tenemos la responsabilidad de establecer una cultura de altas expectativas en nuestras aulas, especialmente en los contextos que más lo necesitan, para empoderar a nuestros estudiantes y conectarlos con temas significativos”, subrayó Pinochet.
Elgueta, con gran entusiasmo, motivó a los estudiantes de tercero y cuarto medio del PAT a asumir el rol de futuros educadores con responsabilidad y pasión. Durante su intervención, compartió su vasta experiencia profesional en contextos de alta vulnerabilidad en Santiago, destacando los desafíos y la importancia de una educación inclusiva y transformadora.
Relató cómo logró reconectar a estudiantes excluidos del sistema educativo debido a diversas vulneraciones, mediante una enseñanza innovadora y significativa. “Es fundamental que los docentes creamos en nuestras capacidades y cultivemos espacios de amor y seguridad para el aprendizaje”, enfatizó.
Uno de los momentos más destacados del taller fue cuando Elgueta presentó su proyecto sobre el proceso de deshumanización en la Alemania Nazi, una iniciativa que capturó la atención de los más de 60 estudiantes conectados. Explicó cómo, a través de métodos innovadores como la lectura gráfica del Diario de Ana Frank, clases sobre judaísmo con un rabino, visitas al Museo del Holocausto en Santiago y una charla con Rudi Haymann, sobreviviente del Holocausto, logró generar un profundo impacto en sus estudiantes.
“Al finalizar la charla con Rudy, él y mi estudiante Kevin compartieron un emotivo abrazo, ambos con lágrimas en los ojos. Kevin le dijo que él también era un sobreviviente. Fue un momento de conexión muy especial. Días después, Rudy escribió en Instagram que esta fue una de las experiencias más significativas que había tenido, debido a la sensibilidad y profundidad de las preguntas de los estudiantes”, compartió Elgueta emocionada.
Cultura de altas expectativas
Elgueta subrayó la importancia de instaurar una cultura de altas expectativas como herramienta clave para transformar la vida de los estudiantes. Resaltó que los docentes deben modelar esas expectativas a través de lo que dicen, creen y hacen, evitando actitudes asistencialistas.
Asimismo, recalcó la necesidad de crear ambientes de aprendizaje seguros y amorosos, con rutinas claras y experiencias que promuevan el desarrollo social y emocional. También enfatizó la importancia de preparar a los estudiantes como ciudadanos globales, activos y comprometidos.
“La creencia de que todos son capaces y el fomento del trabajo en equipo son pilares fundamentales en la creación de una cultura de altas expectativas. Esto no solo es posible, sino necesario para alcanzar la justicia social a través de la educación”, subrayó.
Los estudiantes, motivados por la experiencia de Elgueta en contextos vulnerables, realizaron preguntas sobre la importancia de desarrollar empatía, resiliencia y cómo mantener un compromiso inspirador en la práctica docente.
Finalmente, Jessica Flores, coordinadora del PAT UCM, agradeció a María Francisca Elgueta por sus inspiradoras palabras y destacó que el taller fue un espacio de reflexión, intercambio de ideas y aprendizaje, que los estudiantes podrán aplicar en su futura práctica docente. De este modo, reafirmó el compromiso de la UCM en la formación de profesionales capaces de generar un impacto positivo en sus comunidades educativas.
Crédito: CAP UCM.