HUGO “CHILOTE” AYALA Y SUS 23 AÑOS DE HISTORIA EN HUILQUILEMU
En la antesala a la realización de la 23ª versión de la Feria del Folclor de Huilquilemu, que por primera vez se realizará en formato virtual, quisimos conversar con su principal gestor y quién ha sido durante todos estos años el rostro visible y emblemático de la Fiesta de las Tradiciones del Maule, el cantautor y cultor Hugo “Chilote” Ayala, quien -una vez más- estará presente en la animación del evento folclórico el próximo 27 y 28 de marzo.
En sus recuerdos, aún está latente aquella conversación que sostuvo en 1994 con las autoridades universitarias de la Universidad Católica del Maule y que les llevó a la creación de la 1ª Feria del Folclor de Huilquilemu en noviembre de 1997. “En ese entonces la feria era mucho más pequeña, la hicimos en los patios interiores de la Villa Cultural y participaron 10 locales artesanales, tres puestos de gastronomía típica y actuaron cuatro grupos folclóricos el día sábado y cuatro el día domingo, me acuerdo perfectamente”, aseguró.
¿Cómo se ha forjado este trabajo y compromiso con Huilquilemu?
Con harto sacrificio… El trabajo de la universidad y el apoyo de las organizaciones folclóricas de todo el país y particularmente de la región del Maule, ha sido fundamental. Imagínese que hay grupos que no se han formado en estos escenarios y no se pierde ninguna edición de la Feria. Después de más de 20 años Los Corraleros, Cantares de la Región, Sauzal y muchos otros siguen deleitándonos con su talento en este evento.
Por otro lado, la UCM forjó una marca reconocida a nivel nacional, con este evento cultural en el área musical, artesanal y gastronómica. En lo personal, animar un evento de esta magnitud ha sido un privilegio. Entregarle una actividad tan auténtica, tan campesina, que representa a la Región del Maule al público y a la comunidad agrícola de Huilquilemu es muy gratificante.
¿Cuál es la clave para mantener viva la Feria por tantos años?
Lógicamente con el pasar del tiempo todas las actividades crecen y Huilquilemu no ha sido la excepción, este crecimiento gradual incluye cada vez más desafíos, porque cada año quieres superar el anterior. A esto se suma la diversidad de artistas, si bien hay muchos que ‘repiten el plato’, pero que cada año presentan algo distinto, también están aquellos que llegan desde otros rincones del país con sus espectáculos folclóricos. Esto, sumado a la artesanía y la comida típica hace que esta feria tenga un sello propio. Ha sido fundamental también el incluir actividades familiares, un sector infantil y la tradicional misa a la chilena, que da cuenta del sello de la Universidad Católica del Maule, ya que esta se desarrolla en el museo religioso de la Villa Cultural Huilquilemu.
Este año será una apuesta distinta desde una plataforma online, con transmisiones vía streaming ¿Cómo ha visto la preparación del evento y la recepción de los folcloristas?
Ha sido llamativa y, a la vez frustrante en el sentido de que todos extrañamos ese escenario, quienes somos artistas queremos tener al público frente y ver como disfrutan, pero también hay que rescatar que este esfuerzo por realizar el evento en tiempos de pandemia, nos permitirá llegar con espectáculos de calidad a cientos de hogares de la región, el país y a chilenos que estén en el extranjero, quienes podrán conectar con su tierra a través de Huilquilemu. Es por otra parte, un apoyo al sector folclorista, ya que se han visto marginados en toda la pandemia.
La Feria de Huilquilemu ha sido una tremenda plataforma para folcloristas y cultores de nuestra región que año a año buscan este espacio para presentar sus creaciones musicales ¿Cómo ha influído la realización de esta feria en el posicionamiento de la música folclórica en el Maule? ¿Es un espacio valorado y necesario para los artistas locales?
Claro que sí, tremendamente valorado, muchos conjuntos reconocidos y de nivel han pasado por este escenario, artistas como Quelantaro, cuya última actuación fue en Huilquilemu o los Hermanos Campos, Beatriz Puchimalen en nuestra última versión presencial, por ejemplo, conocen este espacio y lo han llevado con ellos difundiéndolo en distintos lugares. Lo mismo ocurre con agrupaciones como Chamal, los pascuenses Vahi Imene, Tierra Chilena, Altamar (ganadores en el Festival de Viña del Mar) y tantos otros.
Las agrupaciones locales, sin ir más allá, se preparan durante meses para estar presentes en este evento y este año no ha sido diferente, ya que tendremos 15 grupos folclóricos con presentaciones de gran calidad para sorprender a nuestro público que siempre es fiel.