Guatemala integra a investigador de la UCM a su Consejo Nacional de Áreas Protegidas
El doctor en Biología Evolutiva Hugo Benítez recibió un reconocimiento por parte del gobierno guatemalteco, que le otorga acceso de por vida a zonas de conservación en dicho país.
Mediante una resolución del gobierno de Guatemala, el Consejo Nacional de Áreas Protegidas de dicho país inscribió en sus registros al investigador de la Universidad Católica del Maule (UCM), Hugo Benítez, otorgándole acceso de por vida tanto a sus zonas de conservación como a estudios relacionados a la vida silvestre local.
“Fue sorpresivo y muy bonito a la vez, nunca había tenido un reconocimiento de este tipo”, dijo el también director del Centro de Investigación y Estudios Avanzados (CIEAM) del citado plantel.
Benítez, doctor en Biología Evolutiva, recibió la distinción durante su estadía en la capitalina Universidad de San Carlos, donde dictó un curso sobre morfometría geométrica, que después repitió en la Universidad de El Salvador.
“En Guatemala, al final el curso, y tras entregarle yo el diploma a los estudiantes, me dieron a mí un reconocimiento como profesor internacional distinguido, que iba de la mano de un decreto que me incluye como investigador de las áreas protegidas del país de por vida”, señaló.
La conservación del patrimonio natural de Guatemala está a cargo del Consejo Nacional de Áreas Protegidas (CONAP), una entidad gubernamental que depende directamente de la Presidencia de la República.
“Guatemala tiene muchas zonas protegidas como La Riviera Maya y otras que son difíciles de acceder. La biodiversidad allí es inmensa, pero como lamentablemente hay poca investigación, mucha de esa biodiversidad no ha sido estudiada. Existe una gran cantidad de temas que podría dar paso a proyectos colaborativos entre Centro y Sudamérica, para ampliar el conocimiento en biodiversidad y saber cómo estaría influyendo el cambio climático”, afirmó la autoridad universitaria.
El decreto del CONAP es para Benítez, quien posee una amplia experiencia en ecología y evolución, una nueva motivación científica.
“Tengo un colaborador, el doctor Abel Bustamanes, que trabaja en diversidad de arañas e insectos, que me comentó que muchas de las especies descritas en una zona de Guatemala no han sido vueltas a encontrar. Hay además una invitación del mismo Consejo a estudiar el antepasado silvestre del maíz que se denomina ‘teocinte’, con la posibilidad de potenciar este alimento que podría ser originario de áreas aledañas a la Riviera Maya”, puntualizó.
