Con la presencia de familiares del recientemente fallecido académico, los presentes recordaron el lado humano del director de la Escuela de Ingeniería Civil Informática de la UCM.

Haciendo un paralelo con artistas como Giuseppe Verdi; el famoso cuadro El Retrato de Giovanni Arnolfini y su esposa pintado por Jan van Eyck; y la película El Señor de los Anillos; el decano de la Facultad de Ciencias Religiosas y Filosóficas, Padre Mauricio Albornoz, explicó con ejemplos concretos y didácticos la importancia de quedarse con el legado de las personas que parten de este mundo, planteando la necesidad de encausar el dolor propio de una pérdida, para mejorar en nuestras acciones que realizamos a diario.

Sin dudas un trabajo de reflexión que le permitió a los integrantes de la Facultad de Ciencias de la Ingeniería UCM poder darse un tiempo para, en conjunto, recordar aquellos momentos que vivieron con Rodrigo Cofré, recogiendo las enseñanzas que dejó.

El académico Marco Toranzo en la ocasión indicó que “Cada uno de nosotros tiene aspectos positivos que rescatar de Rodrigo como persona… Él además de ser muy preocupado por su familia, era muy dedicado a su trabajo y sobre todo una persona motivadora que te incitaba a tomar desafíos y llevarlos adelante. Al final cuando me detengo y miro el pasado, puedo señalar que tuve suerte de recibir sus consejos”, señaló.

Palabras que fueron complementadas por Felipe Tirado, quien pese a estar en España, siguió la actividad por videoconferencia. “Rodrigo fue profesor mío, colega y amigo. Lo quiero y admiro mucho y destaco todo el amor que le tenía a su familia y a la universidad”, agregando que “Él tenía clara las prioridades de la vida y sabía que el lado humano era lo principal”, detalló.

También quiso ser parte de la reflexión en conjunto Hugo Araya, quien explicó que una de las cosas que más se extrañarán de Rodrigo era la relación que tenía con los estudiantes. “Él siempre tenía su oficina llena de jóvenes y le daba tiempo a cada uno, eso es algo que no podemos perder, porque nuestra universidad y la carrera de Ingeniería Civil Informática ha tenido el sello de ser cercano a los estudiantes, por lo que tendremos que seguir con ello y su legado”, sentenció.

Juan Figueroa quiso entregar su impresión comentando que “Hay un desafío tremendo que tenemos como Facultad, el de continuar con ese espíritu de familia que tenía siempre Rodrigo”, expuso.