Comenzó un nuevo semestre del programa Brotes UCM, liderado por la Dirección de Formación General.

Una nueva versión del Programa Brotes UCM, es la que acaba de comenzar, iniciativa que recluta a estudiantes universitarios, egresadas y egresados, para que apoyen a alumnas y alumnos escolares con altos índices de vulnerabilidad, en distintas asignaturas, entendiendo que por la cercanía de edad y lo personalizado de la atención, este refuerzo impacta de excelente forma en aquellos que reciben este beneficio.

Una invitación que hace la Dirección de Formación General de la UCM a colaborar con la educación y que ha tenido desde su creación (2017) un gran crecimiento no tan solo en la cantidad de jóvenes interesados en participar, sino también en la cantidad de colegios que han querido ir sumándose a este trabajo colaborativo, incluso fuera de la Región del Maule, más todavía con el auge de la educación en línea, facilitado por la actual pandemia.

Sebastián Andrés Vergara Gómez, estudiante de la carrera de Ingeniería en Biotecnología, comentó que su gran motivación para ser parte de Brotes UCM, del que participa desde el segundo semestre del 2020 es que “de pequeño notaba cómo a veces no terminamos de entender conceptos que se explican en clases, no por tener algún déficit intelectual, sino porque muchas veces no se explicaba con las palabras adecuadas. En mi caso, cómo no entendía, memorizaba la materia sólo para conseguir una buena calificación, sin embargo, no terminaba de entender. Con el tiempo me di cuenta que memorizar para mantener buenas notas no servía de nada si no era capaz de comprender el concepto. Cuando comprendes entonces aprendes, y aprender nos permite ver el mundo con otros ojos. Me acerqué a Brotes UCM para apoyar a todos aquellos estudiantes que tengan ganas de aprender y que a veces creen que no son capaces”.

Rocío Guajardo, estudiante de Ingeniería en Estadísticas, de segundo año señaló que su gran motivación es “poder ayudar a los niños, ya que yo siempre tuve apoyo de mi familia cuando me costaba alguna materia, pero hay casos en que no es así, poder brindarle esa ayuda y más en tiempos de pandemia me motivó”.

Importante ayuda

Rocío y Sebastián coinciden en que la ayuda que se puede brindar con el programa Brotes es muy importante para los niños beneficiados y su entorno y no demanda tanto tiempo, por lo que invitan a otros estudiantes a sumarse a los futuros llamados a ser parte.

“Siento que yo aprendí más, que Francesco (el niño que ayudó en el primer semestre), volví a recordar cosas del colegio, aprendí a cómo llegar a él para que hiciera las guías y ganarme su respeto. Saber que con una hora a la semana estas ayudando a un niño que en verdad le cuesta y le faltaba esa pequeña motivación que tú le entregas, es impagable, lo agradecen mucho”, señaló la estudiante de Ingeniería en Estadísticas.

Palabras que fueron complementadas por el estudiante de Ingeniería en Biotecnología: “Si bien uno dedica una breve fracción de tiempo a la semana, he notado que el apoyo entregado, efectivamente ha sido un aporte para sus estudios. Actualmente, con la contingencia sanitaria, la educación de todos los estudiantes se ha visto afectada. En ese contexto, Brotes no sólo ayuda a un estudiante, sino también a los profesores y a una familia. Ser parte de este movimiento junto a todo el equipo, ha sido una experiencia gratificante”, finalizó.

Es importante consignar que, para apoyar a los estudiantes, hay académicos voluntarios de la UCM que realizan la labor de ser los orientadores metodológicos, teniendo este semestre como hito la presencia de una egresada del plantel, quien pese a estar trabajando como académica en otra institución universitaria, también quiso estar presente en Brotes.

El listado de orientadores de este semestre está compuesto por: Marina Fierro, lenguaje; Carolina Palacios, ciencias; Vanessa Cerda, lenguaje; Claudia Narváez, ciencias; Rodrigo Gutiérrez, matemática; y Jorge Molina, historia.