Los jóvenes Felipe Azócar y Esteban Arévalo, de Pedagogía en Educación Física realizan una pasantía en la Universidad de Vic.

Cumpliendo un sueño están los estudiantes de Pedagogía en Educación Física de la UCM, Felipe Azocar y Esteban Arévalo, quienes están realizando una pasantía en la Universidad de Vic, en Cataluña.

Pero, como todo sueño, para lograrse, primero hubo que sortear varios obstáculos, considerando el actual contexto de emergencia sanitaria producto de la pandemia, el que complicó esta experiencia, que en un inicio había sido programada para el 2020.

“En España estamos realizando nuestra práctica de mención, que es lo que nos estaría faltando para egresar”, comentó Esteban, al comienzo de la entrevista.

“Todo partió el año 2019 con un compañero fue se fue de intercambio a Brasil y él nos comentó en qué consistía esto de la beca de intercambio y me dieron bastantes ganas de tener una experiencia similar. Al principio fue un poco complejo, porque yo nunca había escuchado de la Oficina de Relaciones Internacionales de la UCM y ni siquiera sabía que la universidad tenía convenios con otras universidades”.

Con la motivación de realizar una pasantía internacional Felipe y Esteban reunieron los papeles necesarios para realizar el trámite, los que ellos mismos señalaron que era más sencillo de lo presupuestado, luego vinieron las pruebas psicológicas, una charla de orientación y ya estaban listos para irse a Brasil y España, respectivamente.

Hasta ahí todo se encaminaba perfectamente, sin embargo, el destino les tenía preparadas varios cambios a sus planes originales. “Mi primer rumbo en el 2020 fue Brasil, pero por el COVID-19, nos tuvimos que devolver los dos, yo tuve que regresar al mes. Posterior a eso, tuvimos que congelar nuestro estudio. Fue difícil perder un año, no poder titularse con los compañeros de generación, todo por poder cumplir este sueño. Al final terminamos postulando juntos a la Universidad de Vic, donde nos encontramos actualmente y estamos muy contentos viviendo una nueva realidad”, dijo Esteban.

Felipe en tanto, comentó que “Yo también el año pasado alcancé a llegué a España, pero por temas COVID-19 tuve que volver. Lo bueno fue que la universidad me guardó la beca para poder volver este año”.

Pasión por el balonmano

Ya con ambos en Europa, los dos dicen querer empaparse del desarrollo y la cultura deportiva que existe en Europa y particularmente en España, mientras ambos realizan su última práctica en el Club Handball Vic, de la ciudad de Vic, en Cataluña.

“España en esta disciplina es una potencia a nivel mundial. Actualmente en balonmano son campeones de Europa, tienen una trayectoria enorme, por lo que es una muy buena instancia, si es que no la mejor, para poder aprender todo lo posible de este deporte”, complementó Felipe Azocar, quien además agregó que “mi motivación es quedarme acá más de los 6 meses iniciales, ser en algún momento entrenador de algún equipo y así poder ir subiendo y logrando cosas”.

Felipe y Estaban, aprovecharon la instancia y le enviaron agradecimientos a la directora de la carrera de Pedagogía en Educación Física, Jessica Mondaca y al jefe de deportes de la UCM Gastón Díaz.

Por último, ambos tuvieron palabras para sus familias. Felipe Azocar dijo “gracias por el apoyo que me han brindado, por estar siempre pendientes. Es difícil estar acá sin ellos, por supuesto que los extraño muchísimo, pero eso es también es una motivación extra, el que ellos sepan que yo estoy acá cumpliendo un sueño, que obviamente no me voy a dar por vencido y quiero sacar lo mejor de mí para que mis padres y mi hermano, estén orgullosos de lo que pueda lograr”.

En tanto, Esteban Arévalo sostuvo que “gracias a ellos –sus padres- soy lo que soy. Me formaron como persona. Día a día trabajo para que se sientan orgullosos de su hijo y claro, sentirme orgulloso de mi mismo”, finalizó.