Tras recibir la bendición por parte del capellán de la UCM en Curicó, presbítero Víctor Rojas, las y los estudiantes comenzarán su primer proceso de práctica.
En una ceremonia llena de simbolismo y emoción, las y los estudiantes de la carrera de Pedagogía en Educación Especial de la Universidad Católica del Maule (UCM) en Curicó, recibieron la bendición de sus uniformes, un rito que marcará el inicio de su formación práctica en contextos escolares durante el segundo semestre del actual año.
En dicha actividad asistieron académicos, estudiantes y el director de la UCM Curicó, Dr. Enrique Muñoz Reyes, además del presbítero Víctor Rojas, quien dirigió la bendición de los uniformes que acompañarán a los y las estudiantes durante el resto de su carrera.
En el solemne acto, el director de la Escuela de Pedagogía en Educación Especial de la UCM en Curicó, Rodrigo Monné de la Peña, destacó la importancia de este hito para los futuros profesores.
“Nos reunimos para bendecir no sólo el uniforme que ahora llevarán con orgullo, sino también el compromiso que este simboliza. Este uniforme es un símbolo de la dedicación, el amor y la responsabilidad con que enfrentarán los desafíos en el aula y en cualquier contexto educativo. En esta profesión que han elegido, su labor no sólo será enseñar, sino marcar una diferencia significativa en la vida de las personas a quienes apoyarán”, señaló Monné.
Además, subrayó el rol crucial de los y las profesores de Educación Especial en la sociedad. “Los desafíos educativos actuales demandan profesionales comprometidos, que trabajen para minimizar o eliminar barreras de participación para el aprendizaje. Bendecimos no solo estos uniformes, sino también el compromiso que han adquirido al decidir ser profesores”, sostuvo.
Mientras que, para las estudiantes, el acto también representó un momento de gran significado personal y académico, una de ellas fue Mayra Ponce, quien expresó su emoción al recibir el uniforme. “Es un proceso muy simbólico. Después de un primer semestre en el que nos encantamos de la carrera, tener este uniforme es algo muy lindo, tanto para nosotros como para nuestras familias. Ahora, con nuestra práctica, es aún más significativo poder identificarnos como profesores de educación especial”, dijo.
Por su parte, Martina Espinoza, también estudiante de la carrera, compartió sus expectativas ante esta nueva etapa. “Empezamos el primer semestre temerosos y sin conocernos, pero ahora estamos recibiendo nuestros uniformes para iniciar otro proceso, para adentrarnos en un mundo de la escuela donde podremos aplicar todo lo que hemos aprendido”, concluyó.
Créditos: Dirección de Comunicaciones