Jóvenes de otras partes del mundo que están haciendo una pasantía en la UCM se reunieron en entretenida actividad llamada Mateada Cultural.

Con una parrilla con choripanes, los estudiantes pertenecientes al Taller Extra programático de canto, entonando canciones de grupos chilenos como Los Prisioneros, Los Bunckers y cuecas tradicionales, la Oficina de Relaciones Internacionales, recibió a los jóvenes de otras partes del mundo que están realizando una pasantía en la UCM, con el objetivo de que ellos tengan una tarde distinta, puedan compartir con sus pares y conocer un poco más de la cultura chilena.

Así la Mateada Cultural, que ya cuenta con dos ediciones, se está transformando en un espacio de cultura y diversión, que este año convocó a jóvenes de Paraguay, Argentina, México, España y Ecuador y que le dio una oportunidad a cada pasante de relatar parte de sus tradiciones, mientras se comparte un mate caliente y se dan consejos de cómo preparar esta tradicional infusión, momento en que los representantes de Paraguay y Argentina, al igual que el año anterior, tomaron la palabra para relatar cómo se ceba la hierba en sus países.

Además de este grato momento, esta instancia, sirvió para hacer un balance de lo que han vivido en la Universidad Católica del Maule en su estadía académica.

Antonia Florenciano, estudiante de Derecho de la U. de La Universidad Nacional de Canindeyú, Paraguay, comentó que “Fue genial, me recibieron muy bien, fueron generosos, siempre atentos a nuestra situación e hizo que nos sintiéramos muy queridos”.

“La UCM es una institución muy completa, tienen profesionales muy buenos, una gran infraestructura, algo indispensable para nuestro desarrollo profesional y personal”, sostuvo luego la estudiante de Paraguay.

Por su parte Micaela Gallicet, estudiante doctoral de la Universidad Nacional de La Plata, Argentina, en su balance, también valoró la estadía en la UCM, específicamente en la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales, donde realizó su estadía. “Para destacar y algo que me sorprendió es que por más que parezca una universidad pequeña, tienen un equipamiento de última generación y profesionales que están capacitados y tienen un gran manejo de las temáticas que investigan”.

Luego la estudiante doctoral recalcó que “al menos en la carrera donde está el doctorado de Biotecnología Traslacional, están preocupados de ocuparse dando soluciones a los problemas locales regionales, a partir de la misma tecnología que genera la Universidad”.

“Fue sublime”

Un poco más lejos en el mapa, desde México, también apreciaron la formación recibida en la Universidad Católica del Maule.

Así lo hizo saber Alejandro Medina, estudiante de magister de la Universidad Autónoma de Zacatecas, México. “Llegamos a la UCM porque nuestra línea de investigación es el envejecimiento y vimos que hay académicos muy buenos en esta área”, fue su primera acotación.

Sobre su estadía en la UCM el centroamericano no escatimó en loas a la experiencia que ha tenido en Chile y la casa de estudios. “Fue sublime, realmente han sido muy cálidos, cómo nos recibieron el personal de la Universidad y los académicos, me tiene sorprendido por su calidez y apertura”, finalizó.

Crédito: DIRCOM UCM.