Hasta la UCM llegó el reconocido académico la Universidad de Chile Sergio Micco.
Como ya es tradición en el mes de enero, el obispo de Talca y Gran Canciller de la Universidad Católica del Maule (UCM), Monseñor Galo Fernández, se reunió con los académicos y funcionarios de la universidad en el Encuentro con la Comunidad.
Este año, siguiendo con el énfasis en el espíritu de servicio, concepto que ha sido el tópico común de los encuentros organizados durante el año por la Pastoral UCM (Coloquios para la Fe y la Academia), en el Encuentro con la Comunidad, se invitó hasta el Campus San Miguel al académico de la Universidad de Chile Sergio Micco, quien en su exposición desarrolló los 4 argumentos para participar en política.
1. La política como alternativa a la violencia y como condición humana ineludible
“Los seres humanos somos muy diversos, pero tenemos que vivir juntos. Si no queremos resolver nuestros problemas a través de la violencia, la alternativa es ponernos de acuerdo. Y si eso no es posible, se soluciona votando”, dijo Micco enfatizando que la política es ineludible porque representa la única forma de resolver los conflictos de manera pacífica.
2. La importancia de un estado funcional
“Un estado que funciona hace la diferencia. Una persona, un voto, al menos cada cuatro años: el rico, el pobre, el hombre y la mujer, valen lo mismo. Para que haya orden público y una seguridad jurídica básica, se requiere un estado que funcione”, detalló el académico de la Universidad de Chile.
3. La relación entre libertad y política de calidad
Según Micco, los proyectos más personales y las aspiraciones individuales dependen, en gran medida, de la calidad de la política. “Una política bien estructurada garantiza un entorno en el que las libertades personales”, sostuvo.
4. La dimensión religiosa o espiritual: un llamado a la trascendencia en tiempos individualistas
En su intervención, Sergio Micco abordó uno de los principios más profundos de su reflexión: la trascendencia como dimensión esencial de la vida humana, que en una sociedad individualista enfrenta grandes desafíos. Según Micco, la trascendencia se entiende como la capacidad de reconocer y comprometerse con algo que va más allá de uno mismo, algo externo y superior que da sentido a la existencia.
“Vivimos en una sociedad súper individualista, por eso nos cuesta mucho creer en la trascendencia”, afirmó. Este contexto individualista ha erosionado la conexión de las personas con ideales colectivos o superiores, que históricamente han movilizado a generaciones enteras.
Luego explicó cómo, en épocas pasadas, la religión, las revoluciones o el amor por la patria representaban esos pilares trascendentes que impulsaban a las personas a actuar incluso con sacrificio personal. “Hoy, ese sentido de trascendencia ha cambiado; ahora son nuestros hijos e hijas quienes ocupan ese lugar central”, agregó.
A pesar de esta evolución en las motivaciones humanas, Micco subrayó la importancia de recuperar la capacidad de pensar en términos colectivos y trascendentales. La trascendencia, explicó, es esencial para construir una sociedad más solidaria, donde el bien común prevalezca sobre el interés individual.
Un llamado a la responsabilidad y la acción
Tras la exposición, fue Monseñor Galo Fernández quien reflexionó con la comunidad universitaria.
“Quisiera partir por recordar la centralidad que tiene el servicio en el evangelio, en el evangelio de San Juan, el relato de la última cena omite el gesto de la partición del pan, el gesto natural en la vida cristiana y pone otro gesto que hizo Jesús con sus discípulos, que fue cuando se sacó el manto y se puso a los pies de cada uno de ellos, lavándoles los pies” dijo el obispo de Talca, destacando que “es un gesto conmovedor, incluso la reacción de Pedro fue rechazarlo, no podía ser que el hijo de Dios se rebajara de esa manera humillándose como un servidor y Jesús le hizo ver que si no le permite lavarle los pies, no podían tener nada con él, porque había algo esencial del evangelio y era el servicio. Hay una enorme cantidad de evangelios en los que se ve que Jesús no vino a ser servido, sino a servir y la invitación es a recorrer nuestra senda de esa forma, como servidores”.
“Nosotros como universidad ponemos como eje central el servicio, me gusta tener claro que nuestra universidad es de vocación pública, que nuestro rasgo de universidad católica se expresa también en ser una universidad del Maule al servicio de los hombres y mujeres, en la diversidad, de la región completa (…) desde el ámbito de la investigación o el formar profesionales, hombres y mujeres que no solo tengan habilidades de gran nivel, sino que también tengan pasión por el servicio público”, sostuvo el Gran Canciller UCM.
Luego el Monseñor Galo Fernández, dijo compartir con Sergio (Micco) la convicción de que la política es inescapable. “O dejamos que unos pocos nos arrollen o nos dedicamos a ese arte complejo del debate, de involucrarnos, para que tengamos a los gobernantes y los proyectos que hacen bien a nuestra sociedad”.
El encuentro también fue una oportunidad para destacar el papel de la Doctrina Social de la Iglesia en la construcción de una sociedad más equitativa. Monseñor Galo Fernández recordó que esta enseñanza promueve no solo los derechos inherentes a la dignidad humana, sino también los deberes que cada persona tiene hacia el bien común.
Créditos: Dirección de Comunicaciones