Educación: Las ventajas del uso de la tecnología virtual en la educación
Ante la imposibilidad de concentración de alumnos en los establecimientos educativos, debido a la pandemia por el COVID 19, el uso de la tecnología virtual se ha hecho imprescindible para la educación.
Al respecto, el profesor Julio Domínguez, académico del Departamento de Fundamentos de la Educación de la Facultad de Ciencias de la Educación de la UCM, opinó sobre las ventajas del uso de las tecnologías en estos tiempos de cuarentena.
“Estamos en el siglo XXI y se habla de un mundo globalizado, lo que nos permite comunicarnos de forma rápida y de manera sencilla, simplemente apretando un botón en algún aparato tecnológico que tengamos a nuestro alcance. Debido a la pandemia mundial que estamos viviendo se nos presenta la educación en línea como una real y efectiva alternativa para desarrollar habilidades y lograr aprendizajes en nuestros estudiantes”, afirmó.
Sobre las garantías que ofrece esta alternativa, Domínguez indicó que “es flexible en muchos aspectos, el estudiante puede estudiar como quiera y donde quiera que se encuentre, un abanico amplio de opciones en la que el estudiante puede elegir lo más adecuado para él, un entorno de aprendizaje más confortable, de acuerdo a las posibilidades y realidades de cada uno. Por lo tanto, tiene un efecto positivo y muy significativo en el rendimiento académico de los estudiantes, incluso para aquellos con necesidades educativas distintas”, explicó.
Asimismo, continuó, “Se potencia y fortalece la autonomía y confianza en los estudiantes, en cuanto a recursos pedagógicos en esta aula virtual, pues se da la posibilidad de interactuar con recursos tecnológicos más innovadores y lograr una interacción más personalizada entre el profesor y el estudiante”, comentó.
Facilitador del aprendizaje
“De acuerdo a la IX encuesta de uso a internet, SUBTEL del año 2017, arrojó que un 12.6 % de los hogares chilenos no tiene acceso a internet; Por lo tanto, como desafío pendiente, está cómo preparamos a los profesores para que puedan adecuar sus metodologías de enseñanzas a esta nueva modalidad, logrando ser un facilitador del aprendizaje de sus estudiantes. Asimismo, la formación inicial de los futuros profesores desafía a las instituciones de estudio de educación superior, a la incorporación en sus mallas curriculares de asignaturas que conlleven el desarrollo de habilidades y aprendizajes en este ámbito; además de contar con plataformas amigables tanto para los profesores, como para sus estudiantes”.
Con respecto a algunas opiniones que señalan que el aprendizaje se da mejor con la interacción en el aula tradicional, el académico aclaró que “si bien comparto que es muy relevante la interacción que se puede dar en la sala de clase como proceso de socialización entre profesor y alumno, esta nueva manera de realizar las clases nos permite una interacción distinta en la que el profesor juega un rol relevante en cómo prepara sus clases y se comunica con sus estudiantes. Los roles de estudiante – profesor que por años se ha instaurado en la sala de clase, en estos momentos producto de un problema de salud pública mundial les está desafiando en el proceso de enseñanza y aprendizaje a cambiar un pensamiento arraigado por tantos años. Estos dos actores y el sistema educativo en general deben asumir que es una transformación gradual para que sea efectiva y perdure en el tiempo”, indicó.
Para finalizar, el profesor Julio Domínguez ratificó que “Creo que en ningún caso al no tener contacto humano se puede limitar el aprendizaje, dado que en estos nuevos tiempos existen nuevas tendencias y maneras de enseñar distintas a las tradicionales en que fuimos formados muchos profesores. Los desafíos están puestos, ahora es responsabilidad de cada uno de asumir el reto de lograr transmitir conocimientos de una manera distinta e impensada hace unos años o meses atrás”, sostuvo.