Dr. Raúl Silva: “El hongo negro no es tan común, pero cuando ocurre produce una enfermedad grave”
El decano de la Facultad de Medicina de la Universidad Católica del Maule explicó que, al inhalar involuntariamente las esporas del hongo negro, puede invadir las vías respiratorias y comprometer la salud de la persona afectada.
“Son pacientes que necesariamente requieren hospitalización. Hay tratamiento anti fúngico, pero si son administrados por vía endovenosa y en ambientes controlados, por lo tanto, tiene que ser en un hospital”, advierte el Dr. Raúl Silva Prado, decano de la Facultad de Medicina de la Universidad Católica del Maule (UCM) al ser consultado por la ocurrencia de hongo negro y sus efectos en la salud de las personas.
Sobre qué tan común son los casos de hongo negro en personas, el facultativo expresó que “El hongo negro está en todos lados, en todo lugar, pero no producen enfermedad, salvo en el caso que el paciente esté con la inmunidad severamente deprimida. No es tan común, pero cuando ocurre produce una enfermedad grave. Uno inhala la espora del hongo, que están en la tierra o aparecen en los restos del pan cuando quedan a la intemperie. Uno lo inhala y puede producirse si las defensas están muy bajas, algún tipo de enfermedad, principalmente en las vías respiratorias, pueden ser las vías respiratorias altas, como las cavidades paranasales y también en el paladar y en los pulmones, pero a partir de ahí puede invadir cualquier tejido porque expanden por la sangre”, explicó.
Se trata de pacientes de riesgo, que están en quimioterapias, en tratamientos o afectados por cáncer, enfermedad hematológica, con inmunosupresores, corticoides y diabéticos.
Hongo Negro y COVID-19
La relación con el COVID19 es justamente que cuando uno está enfermo con SARS-CoV-2, precisamente está con las defensas bajas. “Por ejemplo, los enfermos que están en las unidades de cuidado intensivo deben ser intubados, colocarles respirador y normalmente la nariz, las cavidades paranasales y la faringe, son mecanismos de defensa porque eliminan una gran cantidad de cosas que uno inhala. Como aquí el aire pasa directo del ambiente puede darse la posibilidad que pasen gérmenes a través de los filtros desde el exterior directo al organismo. Además, estos pacientes con COVID, muchas veces son tratados con corticoides, que bajan la inmunidad. Los pacientes con COVID-19 más graves son aquellos que son más deprimidos inmunológicamente, como los diabéticos”, explicó el doctor Silva.
En ese sentido, el decano de la Facultad de Medicina de la UCM, aclaró que “No es que una cosa tenga directa relación con la otra, las personas con SARS-CoV-2, son pacientes inmunodeprimidos y los hongos afectan justamente a pacientes con sistema inmune débil”, expuso.
A nivel pulmonar, complementó el decano, si se presenta la invasión por este hongo puede producir necrosis –muerte de tejido- en la cavidad nasal, incluso puede producir perforaciones. “Son infecciones que pueden producir un daño en general del sistema respiratorio grave”, advirtió.
El decano explicó que no es posible prevenir directamente la aparición del hongo negro, porque es algo que está en la naturaleza, es decir “Sería cómo prevenir una plaga de moscas, por decir algo, o que las hormigas colonicen repentinamente una parte de la casa. La prevención va por el lado de tratar de que los pacientes que están más debilitados o inmunodeprimidos no lleguen a una descompensación diabética, que, si están con tratamiento con inmunodepresores se cuiden adecuadamente”, detalló.