Joseline Sepúlveda Araya, directora Escuela de Administración y Auditoría de la Universidad Católica del Maule.

Formar profesionales íntegros es parte de nuestro sello como Universidad Católica del Maule, competencias que se vuelven fundamentales cuando enfrentamos, por ejemplo, un proceso tan importante a nivel nacional, como lo es la Operación Renta.

La declaración de renta para muchos es algo esperado y visto como positivo en atención a que esta obligación tributaria, podría resultar en una devolución de impuestos, mientras que para otros es un proceso no tan bien recibido, cuando el resultado final se traduce en un pago de impuestos según la situación que presente cada contribuyente.

No podemos olvidar que la relevancia del pago de impuestos radica en la recaudación para las arcas fiscales de nuestro país y así sustentar la inversión o el gasto público. En esta obligación tributaria, las personas naturales y jurídicas deben declarar ante el Servicio de Impuestos Internos (SII) sus ingresos anuales, correspondiente al año comercial 2020.

Es importante que aquellas personas que durante el 2020 generaron por primera vez sus boletas de honorarios, tengan presente que se verán afectos al pago obligatorio de cotizaciones (sin posibilidad de renuncia).

En la propuesta entregada por el SII, los contribuyentes que emiten boletas de honorarios podrán optar por una base menor para el cálculo de las cotizaciones previsionales obligatorias. Para aplicar dicho cálculo, se debe ejercer este derecho antes de enviar el Formulario 22 de declaración de renta.

Se debe considerar que el plazo para hacer envío de la declaración (F22) es entre el 1° de abril hasta el 9 de mayo 2021. Si bien es cierto, al día de hoy, la propuesta de declaración de renta, se genera automáticamente por parte del SII, el organismo fiscalizador asume las rentas del año anterior (2020), pero en algunos casos solo se presenta una propuesta parcial, lo que implica que el contribuyente debe completar los antecedentes que falten. Para tales efectos, la recomendación es que se dejen asesorar por un profesional del área que sea capaz de indicar si dicha propuesta se presenta o no de manera correcta antes de aprobarla.

La Universidad Católica del Maule, declara dentro de sus objetivos estratégicos garantizar una formación con sello distintivo, preparando profesionales con competencias disciplinares y transversales. Es así, como los nuevos desafíos en la labor del profesional de la contabilidad y auditoría se enmarcan en formar un profesional íntegro, capaz de desarrollar competencias profesionales que le permitan demostrar su capacidad para preparar y presentar estados de información financiera y administrativa, determinar la carga tributaria de un contribuyente por medio de la aplicación correcta de la normativa legal vigente. A la vez está capacitado para la realización de auditorías externas y de gestión, así como también para ejercer en áreas de administración, sistemas de información y control de la gestión de los procesos orientados al cumplimiento de los objetivos y metas de las entidades en las que se desempeñe.

A la fecha, nuestra casa de estudios imparte la carrera en dos formatos, régimen diurno (vía PTU) y vespertino, esta última con admisión vía trabajador, en un horario flexible que permite compatibilizar trabajo y estudios, ya que el horario de clases es de lunes a viernes entre las 19.30 a 22.30 horas. Actualmente está vigente esta vía de acceso hasta el 31 de marzo y para conocer sobre requisitos y postulaciones los interesados deben ingresar a www.ucm.cl.

Cabe señalar que Contador Auditor cuenta con más de 27 años de experiencia y fue la primera carrera en Chile en obtener una acreditación internacional, por lo que ambos proyectos formativos se sustentan en un diseño de calidad que busca resguardar el proceso de enseñanza y aprendizaje de nuestros estudiantes.

“Las opiniones vertidas en esta columna son de exclusiva responsabilidad de quienes las emiten y no representan necesariamente el pensamiento de la Universidad Católica del Maule”.