Organizada por la Universidad Católica del Maule con la participación de especialistas del Ministerio de Educación, de la Pontificia Universidad Católica de Chile y de la Universidad de las Américas.

En Chile, según cifras del Servicio Nacional de Discapacidad, habitan más de 700 mil personas con algún grado de pérdida de audición, realidad que no escapa al día a día que viven las instituciones de educación superior. En su afán por generar acciones de inclusión educativa es que la Universidad Católica del Maule (UCM) se sumó a la semana internacional de personas sordas desarrollada entre el 26 y el 29 de septiembre recién pasado.

Al respecto, la directora de docencia de pregrado UCM, Fabiola Faúndez Valdebenito, señaló que “para nuestra institución es una preocupación central la inclusión y facilitar todo lo necesario para que la integración de nuestros estudiantes con necesidades especiales sea verídica. En ese mismo contexto, estamos muy contentos de recibir a todas las personas que nos sirvan para orientar nuestras acciones y lineamientos para integrar de manera lo más valiosamente posible a todos”, dijo.

“A través de distintas instancias y estrategias del CAP y del PARI, brindamos ayuda efectiva y específica a todos aquellos que la requieran en nuestra comunidad educativa. Es un trabajo sistemático y es muy importante continuar realizando este tipo de actividades para seguir avanzando y generar un mejor ambiente de aprendizaje para los estudiantes”, complementó.

En ese sentido, la gestora de inclusión de la UCM, Katerin Gutiérrez, destacó que fueron los estudiantes quienes desarrollaron actividades junto a la comunidad, ya sea enseñando lengua de señas y costumbres en relación a la comunidad de las personas sordas. “Como actividad de cierre vivimos un coloquio en el que participaron diferentes investigadoras en relación al tema. Uno muchas veces cree que las personas sordas sólo requieren de un intérprete para acceder a la información, pero en realidad se requiere mucho más que eso, y desde ahí nace la necesidad por crear ambientes de aprendizaje para que efectivamente se generen más espacios de accesibilidad”.

En la actividad de cierre participó la profesora de sordos y profesional del área de diversidad del Ministerio de Educación, Andrea Pérez Cuello, quien felicitó a la UCM por la iniciativa. “Me parece que son escasas las oportunidades que existen para relevar temas que no están sobre la mesa y que apuntan a comunidades específicas y en términos más generales más relegadas. Poder hacer distintos tipos de encuentros y acciones además de toda una semana no es frecuente. La participación me pareció excelente para compartir experiencias de distintos puntos del país, yo soy de la Región Metropolitana y me parece muy interesante generar trabajo en red”, afirmó.

En la oportunidad, la profesional experta del MINEDUC presentó las orientaciones técnicas para establecimientos que tienen estudiantes sordos, tomando aquellos focos que son más relevantes para la institución y también para la comunidad en general, especialmente para que pongan atención sobre quiénes son sus estudiantes, cuáles son sus necesidades y cuáles son aquellos recursos con los que se cuenta para seguir avanzando en una educación intercultural y bilingüe para personas sordas en Chile.

Crédito: DIRCOM UCM.