-Camila Ruz egresó en el 2004 de la carrera de agronomía, hoy tras varios años de intenso trabajo es una destacada y reconocida enóloga.

Camila Ruz egresó en el 2004 de la carrera de Agronomía, cuenta que su pasión y vocación nacieron al descubrir el mundo Vitivinícola, un camino difícil que ha recorrido en estos años y que hoy la posicionan como una destacada jefa enóloga en una reconocida Viña.

¿Qué le motivó a estudiar Agronomía?

Desde pequeña supe que quería estudiar agronomía. Me encanta la naturaleza, estoy muy conectada con ella. La primera vez que visité un viñedo y recorrí sus parras pensé y afirmé “seré Enóloga”. En Chile debes ser Ingeniero Agrónomo para ser enólogo. Visite una Bodega en Curicó y definitivamente era mi camino. Amo la bodega, amo el vino, un ser vivo maravilloso, que evoluciona según el tiempo, que te permite hacer arte entre sus aromas y tonalidades, es un lujo haber estudiado, vivir y trabajar en algo que siempre soñaste y amas.

¿Qué recuerda de su paso como estudiante en la UCM?

Tengo bonitos recuerdos. Profesores inolvidables como nuestro decano, Don Nelson Loyola con toda su sabiduría, el mítico profesor Domingo Becerra y sus clases tan entretenidas y las decenas de ayudantías que tomé con diferentes profesores con Samuel Perlroth, Eduardo Von Beneweitz entre otros. Amistades entrañables hasta el día de hoy que son un apoyo dentro del rubro. La disposición siempre amable y cariñosa de los profesores a atender todas nuestras necesidades y el apoyo incansable de la facultad por apoyarnos siempre en cada uno de nuestros proyectos. La mirada holística de ver el agro y hacer de nosotros un variopinto como agrónomos que nos permite desenvolvernos en diferentes áreas asociadas.

¿Cómo ha sido su vida laboral después de egresar de la carrera?

El Agro por lo general es un mundo machista y la enología aún más. Al principio costo mucho, pase por diferentes áreas distintas al vino, pero encarrile llegando a Santa Rita en 2014 y las vendimias nunca más salieron de mi vida. Me sentí feliz y luego de algunos años, el 2018, Álvaro Reyes junto a Pascal Marty, en Viña Marty, me dieron la oportunidad de dar rienda suelta a mis conocimientos enológicos y en Julio de este año me nombraron Enólogo Jefe de la Viña, algo impensado en la Industria Vitivinícola Chilena.  Hoy cada día tomando nuevos desafíos, perfeccionándome y pensando en seguir creciendo profesional y personalmente.

¿Cómo ha sido la experiencia de trabajar como enóloga?

Es una maravilla trabajar en Viña Marty. Trabajas con vinos de alta gama, con uvas Premium y cada materia prima que necesitas de calidad para llevar a cabo nuestro proyecto. Hacemos un vino único en el mundo, fermentado con uva de sake, que se encuentra en 3 variedades. Seguimos creciendo y expandiéndonos cada día y llegando con nuestros productos a diferentes latitudes del mundo. Tienes todo para hacer los mejores vinos, con excelente materia prima y colaboradores que son excelentes. Seguimos creciendo con nuestra planta envasadora y sin duda hay nuevos proyectos que pronto saldrán a la luz. Sin dudar estoy en el lugar correcto, con un equipo fabuloso y de lujo, haciendo lo que más amo.  Simplemente doy gracias por todo lo que hoy tengo en la vida, y a mi universidad por entregarme las herramientas necesarias para enfrentarme al mundo y triunfar en un ambiente que a veces es adverso.