Biofiltros: UCM investiga nuevas alternativas económicas para los residuos agroindustriales regionales
La producción de carbones activados se ha visto notablemente incrementado en las últimas décadas. Debido a la abundancia de residuos en agroindustrias, tales como: cáscara de avellana europea y cuescos de aceitunas, la Región del Maule presenta una gran oportunidad para desarrollar carbonos activados.
Académicos de la Universidad Católica del Maule, Jorge Contreras de la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales y la Dra. Diana Abril, de la Facultad de Ciencias Básica, están desarrollando un proyecto para obtener Biofiltros, con el objetivo de eliminar una amplia gama de compuestos contaminantes desde aire o agua.
El proyecto es una iniciativa financiada por el Fondo de Innovación para la Competitividad Regional (FIC) perteneciente al Gobierno Regional del Maule (GORE) y ejecutada por el Laboratorio Biomateriales de la Universidad Católica del Maule llamado “Obtención de Biofiltros a partir de residuos lignocelulósicos agrícolas y forestales presentes en la Región del Maule”.
¿De dónde surge este proyecto?
La cáscara de nueces, avellano europeo y cuescos de aceitunas, son residuos lignocelulósicos con grandes problemas de manejo. Estos residuos se han tratado de utilizar en la producción de productos, por ejemplo: pellets, pero debido a su estructura fibrosa, produce problemas medioambientales.
Actualmente, la materia prima más utilizada para la fabricación de carbones activados es la cáscara de coco, debido a sus características de alta densidad, abundancia y bajo costo, características que coinciden con los residuos planteados en esta investigación.
¿Cuál es el objetivo del proyecto?
Producir carbones activados de características físico-mecánicas y capacidad de adsorción de contaminantes en fase acuosa comparables a los carbones activados importados, a través de procesos de activación física y química usando como materia prima residuos lignocelulósicos presentes en la región del Maule (cáscara de nueces, de avellana europea y cuescos de aceitunas), determinando las mejores condiciones de activación y las variables técnicas y financieras para lograr su escalamiento productivo.
¿Qué se espera conseguir como resultado final de este proyecto?
El hecho de que la mayor fuente de materia prima para elaborar carbones activados, sea la cáscara de coco, situada en zonas geográficas tropicales, genera una oportunidad para su producción local. Los resultados del proyecto permitirán a agroindustrias, resolver la disposición de sus residuos, aumentar la rentabilidad de su negocio productivo, satisfacer la demanda nacional, generar empleos, e incorporar un producto de alto valor agregado que no se produce actualmente en la región.
¿Cuál es la importancia como investigadores de llevar a cabo este proyecto?
Durante más de 10 años nuestro equipo de trabajo se ha concentrado en buscar nuevas alternativas tecnológicas orientadas al aumento de valor de los residuos de las industrias silvícolas y agroindustriales. Es así como a través de diferentes proyectos financiados principalmente por el Gobierno Regional del Maule a través de los fondos FIC, hemos logrado la puesta en marcha de un laboratorio de síntesis y caracterización de biomateriales tales como: polímeros y biofiltros con diferentes características y usos. Nuestra idea es seguir desarrollando nuevas tecnologías para ser puestas a disposición de las empresas regionales. Durante el mes de agosto realizaremos un seminario en el cual daremos a conocer los avances obtenidos hasta la fecha.