Apoyo y retroalimentación entre pares son claves para fortalecer la educación en pandemia
El Dr. Franklin Castillo Retamal, académico de la Universidad Católica del Maule, compartió con los establecimientos maulinos las fortalezas, debilidades, amenazas y oportunidades en lo que fue la celebración del Día Internacional de la Actividad Física.
La pandemia, producto el COVID-19 ha exigido a las personas a mantener confinamiento en sus hogares, acción sanitaria que ha transformando la vida laboral, familiar, social, economía y por supuesto, la educativa.
En este contexto, el proceso formativo de los niños, niñas y jóvenes no ha sido ajeno a estos cambios, y también los profesores se han tenido que adaptar, pasando de las clases presenciales a las virtuales, lo que cambia el rol docente, en especial lo concerniente a la interacción formador-formando. Todo ello, se ha constituido en un gran desafío, el cual ha permitido repensar la formación inicial de los profesores.
Sabemos que los profesores y profesoras, además del tiempo dedicado a impartir sus clases virtuales y de ahondar en mejores estrategias para el éxito del proceso formativo de sus alumnos, también dedican gran parte a reuniones de planificación escolar. Pero ¿qué pasa en el día a día del docente? ¿cómo cataliza toda esta situación como profesor y como ser humano? Estas son las algunas de las preguntas que repasó el Dr. Franklin Castillo Retamal, académico de la Escuela de Pedagogía en Educación Física de la UCM, en lo que fue el reciente encuentro con docentes de establecimientos educacionales de la Región del Maule con motivo de la celebración del Día Internacional de la Actividad Física, convocado por la UCM y la Seremi de Educación.
Diálogo entre pares
En este evento que contó con gran convocatoria, el especialista hizo un llamado a las autoridades del Ministerio de Educación a abrir espacios sistemáticos de diálogo entre pares, donde los docentes tanto de las escuelas urbanas como rurales intercambien sus experiencias, con base en sus diferentes realidades, sus emociones, sus planteamientos y opiniones.
“Así como a los profesores se les exigen reuniones para la planificación escolar, para presentar sus estrategias, así mismo debe existir un espacio de encuentro entre los profesores, una oportunidad para hablar de colega a colega, enriqueciendo nuestra vida, despejando dudas, retroalimentándonos con las situaciones y experiencias de cada uno”, propuso el Dr. Castillo.
Para el investigador de la Facultad de Ciencias de la Educación de la UCM, luego de un año de confinamiento preventivo en los que el patio, el aula y el gimnasio se trasladaron a casa, específicamente a las pantallas de nuestros computadores o móviles, es necesario e indispensable que entre pares se escuchen, que interactúen a menudo, conformando una comunidad que permita la retroalimentación y el apoyo.
En su charla, el académico e investigador, presentó un diagnóstico basado en los datos recogidos de las experiencias de los estudiantes en Prácticas de Síntesis Profesional. El estudio arrojó las fortalezas, debilidades, amenazas y oportunidades que presenta el trabajo en modalidad virtual en los diferentes centros educativos de la Región.
Entre las fortalezas están el manejo de contenidos relacionados con las bases curriculares, flexibilidad cognitiva ante situaciones cambiantes, creatividad e innovación en actividades y metodologías, reutilización de los recursos tecnológicos, experiencias exitosas e intercambio profesional. Mientras que se detectaron debilidades, como permanente dudas sobre el trabajo realizado, poca o nula interacción con los estudiantes, espacios reducidos y un dato preocupante que, ante las necesidades especiales, la retroalimentación es escasa o nula.
Como amenazas están la realidad contextual de los estudiantes, la reducción de contenidos, las prioridades de los establecimientos, dejando a un lado lo realmente significativo en el proceso de aprendizaje, el poco interés de la comunidad educativa y apoyo medio o bajo por parte de los padres y apoderados.
Asimismo, entre las oportunidades presentadas, están el conocimiento y manejo de plataforma digitales y programas de educación, nuevas formas de cautivar a los estudiantes, utilización de materiales de bajo costo o reciclados, reforzamiento de habilidad comunicacional, mayor difusión y circulación del material.
Cabe destacar, que el estudio realizado arrojó que, en el primer semestre del 2020, un 85,7 por ciento de los profesores encuestados consideró que la priorización de los objetivos ha sido beneficiosa para el proceso educativo. Por otra parte, el 64,3 por ciento de los docentes señaló sentirse afectado desde el punto de vista de las dificultades, por los nuevos métodos de enseñanza.
En su conversatorio, el Dr. Franklin Castillo afirmó que “Hay que tener en consideración lo que significa este confinamiento en el profesorado como la adaptación de modelos, la utilización de recursos, el redescubrimiento de habilidades, las posibilidades de cambio, pero fundamentalmente hay que repensar la escuela, la educación del siglo XXI”, afirmó.