Análisis: Alameda de la ciudad de Talca
Fernando Ávila R., administrador Provisional de Ingeniería Forestal UCM.
El estudio realizado a fines del año 2019 por estudiantes de la carrera de Ingeniería Forestal de la Universidad Católica del Maule, señores Mike Rojas R. y Sebastián Schwencke V. como parte de los requisitos para optar al título de Ingeniero Forestal, cuyo académico patrocinante fue el señor Fernando Ávila R. académico integrante del Centro de Desarrollo para el Secano Interior perteneciente al Departamentos de Ciencias Forfestales revela que, en la Alameda de la ciudad de Talca, existen en total 946 individuos arbóreos distribuidos en 53 especies diferentes. La especie predominante es el Platanus con un total de 354 individuos, distribuidos a lo largo de las 18 cuadras que conforman este hermoso paseo peatonal.
El Platanus hispánica, conocido vulgarmente como plátano de sombra alcanza un 26,0% de presencia lo que significa un total de 246 ejemplares, con una altura y diámetro promedio de 16,6 m y 56,3 cm. respectivamente. Luego encontramos el Platanus orientalis, cuyo nombre común es plátano oriental, que alcanza un 11,4% del total de individuos; vale decir 108 ejemplares, con una altura promedio de 20,4 m y un diámetro de 66,7 cm.
El alto nivel de preferencia de esta especie en comparación con otras se debe probablemente a que tienen la capacidad de alcanzar una gran longevidad, una buena adaptación al medio urbano, alta resistencia a plagas, enfermedades y daños ocasionados por los humanos, produce abundante sombra, además de su gran valor estético y ambiental.
La tercera especie en importancia corresponde al Populus alba con un 8,0% (76 ejemplares); un 7,5% corresponde a Ailanthus altissima (71 ejemplares) y un 6% para Fraxinus excelsior (57 ejemplares). Cabe señalar que en estas cinco especies identificadas en la Alameda se representa el 59,0% del total de especies identificadas. El gráfico siguiente representa lo señalado precedentemente.
El resultado anterior deja en evidencia la escasa diversidad de especies arbóreas del área de estudio, ya que según Terrazas et al (1999 citado en López, 2001) ninguna especie arbórea debe sobrepasar el 5% de la población total del arbolado de una ciudad. Es de suma importancia fomentar la diversidad de especies, como forma de asegurar el patrimonio arbóreo de las zonas urbanas ante la posible afectación de plagas y enfermedades, así como diversificar y caracterizar el paisaje. Por consiguiente, una mayor variedad de especies atraerá un mayor número de biodiversidad, a pesar de que las áreas verdes con mucha heterogeneidad dan el aspecto de un paisaje desordenado.
Por otra parte, es importante indicar que, del total de especies identificadas en el censo realizado, en trece de ellas solo se encontró un ejemplar en toda el área de estudio. Estas son: Araucaria heterophylla, Cercis siliquastrum, Eriobotrya japónica, Ginkgo biloba, Laurus nobilis, Maytenus boaria, Paulownia tomentosa, Phoenix dactylifera, Pilgerodendron uviferum, Pittosporum tobira, Prosopis chilensis, Quercus suber y Schinus polygamus.
Del total de árboles presentes en la alameda de Talca solo un 7,8% presentaban un estado fitosanitario regular, o sea, con algún problema de coloración anómala o bien presencia de plagas, tres árboles en estado malo, o sea, con serios problemas de alguna enfermedad o plaga que ponen en riesgo su supervivencia, o bien por deficiencia en el follaje, muerte apical o defoliación y sólo se encontró un árbol muerto.
Se identificaron ocho tipos de daños fitosanitarios, distribuidos en los árboles a lo largo de la alameda, presentando en algunos casos más de un problema de esta naturaleza. Se puede inferir que en un total de 32 árboles (43,2%) se presentó solo un problema fitosanitario, lo que significa que en el resto de los árboles había más de un daño. El problema más importante de ellos y que fue identificado en 39 árboles, es la presencia de “quintral” (Tristerix corymbosus), una planta parásita que se alimenta de los nutrientes de su hospedero. Lo anterior representa 4,1% de la población total analizada y diagnosticada con la presencia de este parásito. La principal medida de control para este problema es realizar una poda sanitaria donde se eliminen todas las partes que se encuentren infectadas.
El segundo problema fitosanitario más común en este espacio peatonal es el daño mecánico alcanzando un 18,9%, vale decir, 14 árboles presentaron este problema. Partes muertas es el tercer problema más frecuente con un 16,2%, de la población diagnosticada con problemas de esta naturaleza.
Realizando las podas sanitarias se podría reducir un 58,1% de los árboles en estado regular, logrando alcanzar un 96,3% de los árboles en buen estado.
Los daños mecánicos identificados fueron vandalismo (clavos en el fuste, corteza tallada), podas mal ejecutadas (podas mutilantes, ápices cortados (topping) y desrames producto de la fuerza del viento.
Finalmente se puede decir que, en el resto del arbolado presente su estado fitosanitario es bueno con un desarrollo de hojas, flores y frutos de forma normal.
La calidad de vida de las zonas urbanas tiene cierta relación con la cantidad y calidad de las áreas verdes y del arbolado urbano presente. Es por esto que se hace de vital importancia la necesidad de realizar un buen manejo de este recurso, ya que nos brindan múltiples beneficios ambientales, sociales y económicos. Por otra parte, también se pueden presentar algunos inconvenientes de carácter social con el arbolado, esto debido a los problemas alérgicos que provocan algunas especies arbóreas.
Se destaca la necesidad de la existencia de este tipo de estudios en todas las áreas verdes para mejorar la gestión de mantenimiento de las mismas, ya que estos espacios son de vital importancia por su contribución a la descontaminación del aire y del medio urbano, sino que también ayudan a incrementar el bienestar y calidad de vida de las personas.