Altos estándares de conservación ahora cuidan la colección de Textil Litúrgico del Museo de la Villa Cultural Huilquilemu UCM
Durante un año el equipo del museo desarrolló un trabajo dedicado y silencioso, que permite resguardar y poner en valor los objetos que se custodian, los que fueron conocidos en visita por el gran canciller del plantel, Monseñor Galo Fernández.
Entre diciembre 2019 y 2020 se ejecutó con éxito el proyecto “Almacenamiento y puesta en valor de la colección de Textil Litúrgico del Museo de la Villa Cultural Huilquilemu UCM”, sorteando las dificultades producidas por la pandemia del COVID-19, trabajo que permitió el almacenamiento de la totalidad de la colección compuesta por 266 piezas, los que ahora se encuentran cuidados bajo altos estándares de conservación, además de una organización física que facilita el acceso para su monitoreo permanente de gestión e investigación.
Dicha iniciativa fue financiada por el Fondo para el Mejoramiento Integral de Museos, administrado por la Subdirección Nacional de Museos del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural.
En este contexto, el pasado 28 de diciembre, el gran canciller de la Universidad Católica del Maule (UCM), Galo Fernández, visitó la Villa Cultural Huilquilemu del plantel, oportunidad en la que también pudo conocer la Biblioteca Pública de la Villa, que desde el 2017 presta servicio a la comunidad en la sede social de la junta de vecinos del sector.
El Gran Canciller de la UCM se mostró gratamente sorprendido por la magnitud e importancia de la colección de textiles litúrgicos que se resguardan en las dependencias del museo y admirado de la dedicación puesta en el trabajo realizado, la que permitirá conservar las piezas, y, además, darlas a conocer a la comunidad en general y también a los investigadores.
Prontamente, el catálogo que consigna la investigación realizada y que permitirá difundir la belleza de esta colección que se resguarda en el Museo de la Villa Cultural Huilquilemu, será presentado por el Gran Canciller.
“La Villa Cultural Huilquilemu de la UCM se encuentra cerrada al público hace algunos años, a la espera de la concreción del proyecto del Gobierno Regional del Maule, que busca su restauración y puesta en valor para que vuelva a estar a disposición de toda la comunidad maulina. Una de las formas de mantener viva su memoria es este importante proyecto, que ha permitido recuperar y clasificar una cantidad importante de textiles litúrgicos que serán parte de la muestra museística a futuro”, comentó el director general de vinculación de la UCM, Jorge Burgos, quien acompañó la visita, agregando que “En el intertanto, procuraremos que en otros espacios universitarios o en conjunto con nuestros socios de otros museos, esta muestra pueda ser conocida por la comunidad, pues da cuenta de nuestra identidad como región”, indicó.
Sus características y contexto histórico
Durante la ejecución del proyecto se pudo tener un acercamiento detenido a cada pieza, su manufactura e iconografía, lo que determinó el desarrollo de una exhaustiva documentación visual, que incrementó el registro fotográfico existente, y motivó la realización de una investigación preliminar de la colección, que identifica sus principales características y la contextualiza históricamente.
“Parte esencial de las labores que se realizan en un museo son silenciosas, ocultas y están enfocadas a resguardar y poner en valor los objetos que se custodian”, comenzó relatando Ana María González, encargada de la Villa Cultural Huilquilemu de la UCM, agregando que “El año 2020, mientras la gran mayoría de los chilenos realizó su labor desde casa, nosotros tuvimos el privilegio de trabajar directamente con las colecciones, cambiando el computador por la máquina de coser, la lupa, la brocha o la máquina fotográfica. El esfuerzo realizado y que hoy nos permite ver sus frutos, fue posible por el trabajo de voluntarias, colaboración multidisciplinaria y el esfuerzo conjunto del Museo y equipo, con la guía profesional de la conservadora Gisella Morety”, dijo.
Durante el proceso completo, complementó la encargada, “Se documentaron visualmente muchos detalles y elementos significativos de la manufactura de la colección, se indagó sobre su procedencia, simbolismos y las iconografías que dan cuenta de los contenidos propios de la fe y de las formas de comunicarlos”, expuso.
Finalmente, y con el objetivo de acercar las labores del museo a toda la comunidad, se realizó una cápsula audiovisual en la que se explica la nueva forma de conservar los textiles y sus principales características.