Espacio de colaboración entre pares es impulsado por la UCM y ha apoyado a más de 500 novatos, en adaptación a la vida universitaria y aspectos académicos.

“Participar de esta experiencia me permitió apreciar y valorar que esta política de integración solidaria revela una valiosa variable del alma mater de nuestra casa de estudios, puesto que denota una preocupación, tanto por lo académico, como por el estudiante en su dimensión de persona”. Con estas palabras Javiera Bolbarán, de cuarto año de medicina de la Universidad Católica del Maule (UCM), se refirió a su participación como tutora par al interior del plantel durante 2018.

“Las tutorías permiten fomentar la vocación de servicio y solidaridad, valores olvidados a veces, por un excesivo individualismo, competitividad o egoísmo, que nos pueden llevar finalmente, en un futuro, a un materialismo consumista y al lucro; en definitiva, a una deshumanización de nuestra verdadera vocación”, reflexionó esta médica en formación durante la ceremonia de bienvenida a tutores 2019 y reconocimiento a tutores 2018 del Centro de Apoyo al Aprendizaje (CAP) de la UCM.

Aprendizaje entre pares

Un total de 586 estudiantes UCM de primer año recibieron acompañamiento durante 2018 a través del Centro de Tutoría del CAP, espacio organizado y sistematizado de colaboración en el aprendizaje entre pares.

Son los tutores quienes dan vida al trabajo de este centro. Fueron 67 estudiantes en el primer semestre y 57 en el segundo, que cursan desde segundo hasta quinto o sexto año, de 27 carreras diferentes entre Talca y Curicó -se proponen este 2019 llegar a 31-, y que apoyan a jóvenes novatos en adaptación a la vida universitaria como plazos, beneficios, uso de biblioteca, aspectos académicos, refuerzo de contenidos, estrategias para la comprensión de lectura, colaboración en resolución de problemas, entre otros.

En palabras de María de los Ángeles Opazo, coordinadora del Centro de Tutoría, “los números dan cuenta de la gestión que tiene como actores principales a los tutores, estudiantes comprometidos con sus pares, con el quehacer estudiantil, con un fuerte compromiso social, empapados de los valores de nuestra universidad. Su trabajo es fundamental para monitorear el proceso de inserción a la vida universitaria y a la cultura académica de sus compañeros”.

Sello UCM

¿Cuánto aprendemos cuando enseñamos? A través de esa pregunta, la vicerrectora académica de la UCM, Mary Carmen Jarur reflexionó sobre el proceso de acompañamiento entre tutores y tutorados, “donde todos aprendemos a escuchar, a aceptar y respetar las diferencias, darnos cuenta que todos sabemos algo, identificar en los gestos del otro las virtudes de ambos y en muchas ocasiones nos vemos a nosotros mismos. Los tutores se destacan entre sus pares no solo por el desempeño académico, sino porque en ellos se encontraron características que nos permiten un trabajo comprometido y consciente, aportando una fuerza de cambio positiva en los estudiantes de primer año”.

Como desafío para este año, desde el Centro de Tutoría del CAP pretenden aumentar de 70 tutores en el primer semestre de 2019 a 80 en el segundo, lo que equivale a un 14.3%.