Respondiendo a las demandas de los estudiantes, se instaló un elevador en el edificio Carmen.

Un importante hito que responde a la necesidad manifestada por los estudiantes fue la inauguración de un nuevo ascensor en el edificio Carmen de la sede Curicó de la U. Católica del Maule. Esta nueva implementación es un gran avance a la inclusión, ya que permitirá a los alumnos con situación de discapacidad física y visual, tener mejor acceso a los espacios.

El rector Dr. Diego Durán destacó que “Estamos celebrando algo que es muy importante para la institución: que es posible, a través del diálogo, establecer un camino de mejora continua. Hay muchas necesidades que tenemos como universidad, en distintos ámbitos, incluyendo infraestructura, y este proyecto nace como una necesidad e interés de los estudiantes en las mesas de trabajo. Lo interesante es que hay una canalización de esas necesidades, por lo tanto, la institución busca una manera de poder sacar adelante esto y hoy celebrar la implementación del ascensor”.

Asimismo, la directora de la sede, Pilar Ahumada agradeció a los estudiantes por retroalimentar a la institución para realizar mejoras continuas que benefician a toda la comunidad. “Nos costó bastante sacar adelante este proyecto, principalmente por las dificultades técnicas, sin embargo, hoy vemos con orgullo que disponemos de un edificio más inclusivo para los estudiantes, principalmente para aquellos en situación de discapacidad, para que se sientan que son parte de la institución”, explicó.

Mejor conexión

El director de la Dirección de Informática (DI), Cristian Matamala, destacó que se han hecho tres avances significativos en materia de mejoras tecnológicas para la sede Curicó. La primera de ellas, tiene referencia a la cobertura wifi.

“La demanda ha aumentado, hoy necesitamos estar conectados desde el celular, el computador o de cualquier dispositivo electrónico que tengamos. Un aspecto que teníamos dificultad era el edificio Carmen, porque tiene muros muy grandes, entonces en algunas zonas no teníamos una cobertura óptima. Con el equipo de infraestructura del edificio empezamos a buscar estrategias que nos permitieran aumentar la capacidad de antena, para que los alumnos que estén en el edificio Carmen, Prat o Merced y en Los Niches, se puedan conectar de mejor manera”, explicó Matamala.

Es así como se aumentó de 12 antenas a 25, principalmente en los edificios Carmen y Prat, incluyendo una antena en el Centro de Extensión Cultural. Mientras que en el campus San Isidro en Los Niches “hicimos un trabajo aún más extenso, porque teníamos una conexión bastante mala y antigua y los alumnos no se podían conectar. Es así como incorporamos 10 antenas, de interior y de exterior, ya que antes no había ninguna. La idea es que los alumnos que estén en las áreas verdes puedan aprovechar esos espacios y conectarse”, aseguró.

Otro avance significativo fue la renovación de una sala de computación en el Edificio Prat. “Teníamos alrededor de 21 computadores que eran bastante antiguos y que estaban disponibles para cursos que se hacían a empresas, pero con la renovación ahora lo podrán utilizar alumnos para uso académico. Son 21 equipos renovados, soporte y garantía de 4 años, mayor capacidad de procesamiento, es tecnología de última generación”, destacó Matamala.

Finalmente, el director de la DI anunció que desde febrero hubo un cambio de proveedor del servicio de conexión: la empresa Telefónica del Sur, que asegurará entregar un mejor servicio a los estudiantes. “Se mejoró el ancho de banda, en Curicó teníamos 100 mega y hoy a 350 mega. Las redes internas que hoy tenemos aumentaron de 100 megas a 1 giga. Hoy los alumnos tienen correo Gmail y ocupar todas las aplicaciones que tiene Google; también estamos llegando a Microsoft de manera mucho más rápida y efectiva, además de que aumentamos la seguridad de la red”, dijo.