Facultades de Ciencias de la Educación, Ciencias Religiosas y Filosóficas, y Ciencias Básicas del plantel se dieron cita para coordinar acciones junto a la Vicerrectoría Académica.

Diversos aspectos en relación a la formación inicial docente, como son las prácticas tempranas y profesionales, las metodologías que aplican los académicos sobre los estudiantes universitarios en el aula, el desarrollo de investigación pedagógica, entre otros, son los que se abordarán articuladamente por el grupo de facultades responsables de la formación de profesores de la Universidad Católica del Maule.

En relación a este ambicioso proyecto financiado por el Ministerio de Educación y que se extenderá hasta diciembre de 2021, es que la vicerrectora académica de la UCM, Mary Carmen Jarur, realizó una presentación general a las facultades comprometidas, oportunidad en la que se acordaron ciertos énfasis sobre este trabajo.

En la reunión, desarrollada el viernes 31 de mayo en el auditorio Eugenio Munita de la UCM en Talca, la vicerrectora académica junto con expresar su compromiso para con el éxito del proyecto, comentó que se busca la consolidación de la docencia de pregrado, el modelo formativo UCM y la política pública en relación a la formación docente.

“Hoy ratificamos el compromiso de las pedagogías y su vínculo bidireccional con los territorios escolares. Siempre tenemos que tener presente cuáles son las necesidades de nuestras comunidades en la formación de profesores. Nuestros egresados son agentes de cambio real, ellos llevan la misión institucional”, señaló la vicerrectora Jarur.

“Un eje complementario, pero no menos importante es la investigación pedagógica y en la formación de profesores, nuestro carácter universitario da cuenta de ello, y aquí está la real evidencia de la profundidad de la formación que entregamos, refleja nuestra excelencia y la puerta para ser referente a nivel internacional”, agregó la vicerrectora académica de la UCM.

Las líneas de trabajo definidas son el alineamiento curricular de las nueve pedagogías para responder a las necesidades del contexto en donde se van a desempeñar los profesores y al modelo formativo de la Universidad; fortalecer el modelo de prácticas entendido como la vinculación con el medio, desarrollo de investigación científica que enriquezca la formación de los profesores, y la optimización de la gestión de calidad.

Facultades comprometidas

Sobre lo que se aspira alcanzar, el Dr. Rodrigo Vargas, decano de la Facultad de Ciencias de la Educación de la UCM, comentó que “Es un proyecto interesante que nos pone en una situación de juego permanente en mejorar nuestras prácticas pedagógicas, desarrollar la investigación y lograr algo que por muchos años hemos ansiado que tiene que ver con el efecto de nuestras prácticas pedagógicas de los estudiantes que están en la escuela y que por supuesto logren mejores rendimientos académicos. Es un desafío tremendo que tenemos que homogenizar las tres facultades formadoras de profesores, proceso que tiene que ver con las prácticas pedagógicas”, dijo.

Para el Dr. Víctor Hugo Monzón, decano de las Facultad de Ciencias Básicas del plantel, el desarrollo de este tipo de iniciativas representa una tarea compleja, pero que “Debemos mirarla desde la oportunidad, para reflexionar sobre experiencias y errores anteriores en pos de la necesidad de hoy en la formación inicial de profesores. Insisto en que se piden objetivos complejos, que nos ayudarán a reflexionar sobre cómo dar respuesta sobre ellos. Los indicadores son de procesos, no un número para poder concretar una mejora en la formación inicial docente”, expuso.

Como un gran desafío y oportunidad para asumir nuevas miradas en la formación de profesores, calificó este proyecto Mónica Hernández, directora de la Escuela de Pedagogía en Religión y Filosofía. “Representa una oportunidad para que las tres facultades que tienen programas de pedagogía puedan instalar procesos innovadores en la formación inicial de profesores de modo articulado y respondiendo con pertinencia y calidad a los desafíos del contexto educativo. En una dinámica de trabajo colaborativo se busca fortalecer la docencia de pregrado, la vinculación con el sistema escolar, la investigación pedagógica y la gestión institucional, cuatro dimensiones del proyecto que cuenta con interesantes tareas que sin duda van a contribuir a contar con mejores programas de pedagogía para la región y el país”, afirmó.